VALÈNCIA. La Sala d’Exposicions Municipal d’Algemesí exhibe, hasta el próximo 24 de febrero, la exposición de las obras finalistas del XXIV Premio de Pintura 'Ciutat d’Algemesí', un certamen que, por su dotación económica de 6.000 euros al primer premio y por la reputación y prestigio de su jurado, es uno de los más concurridos y valorados del panorama español. Se han presentado a concurso más de 275 obras en esta edición que ha contado con la colaboración de la Diputación del València y con un jurado que ha seleccionado las 20 obras finalistas que componen esta exposición que resume visualmente los códigos de la pintura en la encrucijada actual.
El jurado ha estado compuesto por José Manuel Ciria, pintor representante de la nueva abstracción instalado en Nueva York, Pilar Tébar, directora de la Asociación de Críticos de Arte de València, Marisol Salanova, crítica de arte, Esteve Adam, pintor premio BMV y Eugenio Ampudia, artista visual internacional que acaba de recibir el premio AECA de mejor artista vivo en ARCO.
Ellos han sido los encargados de realizar esta selección de obras que marcan las diversas directrices del lenguaje pictórico en la actualidad. Se puede observar la vigencia de la abstracción en su vertiente más expresionista basada en la “pintura-pintura” de Rebeca Plana, Ion Etxeberria y Luis Olaso; otras indagaciones abstractas van en la senda vinílica de Juan Carlos Forner y Elena Rato. También se aprecia una nueva oleada surrealista en el realismo de Núria Farré, Inma Fierro, Eduardo Serrano, Isabel Gómez, Eva Vázquez y Xavier Monsalvatje. La revisión del paisaje llega con las geometrías de Blai Tomás y el impulso abstracto de Antoni Roig. Al mismo tiempo se ha señalado una corriente neodadá a la hora de incorporar la acción de tejer en la técnica de Jarr o Alexandra Knie. La pincelada vigorosa de Alejandro Martínez simula un dibujo a sanguina, y el gesto de Inma Coll e Isidoro Moreno le aportan la "dignidad" a su Can. La visión más crítica con la realidad la da la figuración enérgica y reivindicativa de María Carbonell.
Los límites entre la fotografía y la pintura bajo el concepto anglosajón de image están presentes en la obra ganadora de Pedro Peña, Museum Hall, declinada en clave monumental a partir de la combinación de varias técnicas.
“Dedicarse al arte significa elegir una realidad donde instalarse”.
Jordi Teixidor