VALÈNCIA. La factoría valenciana de Ford Almussafes recupera, de forma temporal, el turno de noche en la sección de motores para atender un pico de demanda en el mercado norteamericano. Se trata de una medida excepcional para cubrir las necesidades de producción para las plantas de EEUU, aunque sin fecha de finalización. Una decisión que contrasta con la paralización de la planta de vehículos en la fábrica la próxima semana del 16 al 20 de mayo, ambos inclusive, por las tensiones en la cadena de suministros de componentes que se han agravado por la invasión de Ucrania.
El nuevo turno será reducido, nada que ver con el que había hasta enero de este año en la fábrica, y arrancará este próximo domingo 15 de mayo y sin fecha de culminación de la actividad nocturna, por el momento. Empezará con 40 operarios de producción y 15 técnicos y oficiales, señalan a este diario fuentes sindicales. La semana siguiente, es decir, la del 16 de mayo y que coincide con la suspensión de la actividad en vehículos, se incorporarán otros 20 operarios de producción más. Todos ellos serán voluntarios.
Según explican las mismas fuentes, se trata de una petición de la dirección para poder atender un repunte de la demanda de coches en el mercado de EEUU. Un encargo que, según destacan, evidencia la buena posición de la factoría valenciana y su flexibilidad laboral. "Aunque es un 'miniturno' y no sabemos cuánto tiempo durará, es una noticia positiva porque nos permite reubicar a parte del excedente que se produjo al desaparecer el Mondeo", señalan. Cabe recordar que las últimas unidades de este modelo salieron de las instalaciones valencianas el pasado 1 de abril, según el calendario previsto por la compañía.
Así, lo que se pretende ahora con el trabajo en horario nocturno es aumentar la producción de los motores 2.0 GDI y los 2.0 y 2.3 Maverik EcoBoost, que fabrica Almussafes para el mercado norteamericano. En concreto, se envían a la plantas de Louisville, para el modelo Escape, el Kuga americano; la de Flat Rock, para el modelo Lincoln; y la de Oakville, para el crossovers Edge. Asimismo, el Mustang y la Transit Connect que se montan en Estados Unidos también utilizan estos motores con sello valenciano.
Actualmente, en la planta de motores de Almussafes trabajan un millar de empleados que a diario fabrican unas 1.800 unidades, 900 en turno de mañana y las 900 restantes por la tarde. La previsión es que el nuevo turno de noche se encargue de otras 400, por lo que la previsión es que salgan al mercado 2.200 motores al día desde las instalaciones valencianas, explican las mismas fuentes.
"Esta decisión es una muestra más de cara a la dirección de la flexibilidad de la planta de Valencia y de que somos capaces de cumplir lo que nos piden. En EEUU, Ford tiene plantas de producción de motores y, sin embargo, ese incremento nos lo adjudican a nosotros. Confían en que podemos cumplir y responder a ese incremento de la demanda encontrando de manera rápida a los voluntarios necesarios para poder prestar el servicio", destacan desde la factoría.
De hecho, explican que en cuanto se les encargó la formación de este nuevo turno se consiguió suplir con creces las necesidades laborales porque más de un centenar de personas se ofrecieron voluntarias para encargarse del pedido. "Esto demuestra la implicación de la planta con la compañía", resaltan.
Hasta hace solo unos meses el turno de noche era una jornada más en la fábrica valenciana. No obstante, en enero de este año se eliminaba ante la fuerte caída de la producción por falta de componentes y de demanda. Y es que este horario en momentos complicados siempre acaba en el punto de mira por el coste que supone en cuanto a logística para la multinacional.
De hecho, ya desapareció en 2009 por la crisis económica, pero se recuperó en 2013 generando entonces cerca de 1.000 empleos, que se fueron reduciendo en los sucesivos ejercicios. Ahora se retoma, pero todo parece indicar que de forma temporal, y con menos trabajadores, ya que en su momento llegó a emplear a 700 personas, aunque los sindicatos esperan que pueda perdurar unos meses.
Y mientras tanto, el Comité de Empresa y la dirección pactaban esta misma semana una parada de la actividad en la planta de vehículos para la próxima semana, en el marco del actual ERTE, vigente hasta el 30 de junio. Los motivos de este paro son el atasco en el puerto de Shanghái y la dificultad en el suministro de un proveedor ucraniano. "Continúan las tensiones de la cadena de suministros de componentes, agravadas por la situación geopolítica en el este de Europa", señalaban en un comunicado los sindicatos.
No obstante, la planta de motores sí trabajará toda la semana que viene, y los días de ERTE previstos para esta semana se retrasarán al 10 de junio y del 20 al 23 de ese mes. En Mecanizados se parará la producción los días 14 y 15 de mayo en todas las líneas excepto la de culatas. La parada comenzará a las 22 horas del viernes 13 hasta las 22 horas del domingo 15. Estas paradas sustituyen al ERTE previsto para el 18 y 19 de mayo. Y es que semana a semana, la comisión va acordando modificaciones en las jornadas previstas para adaptarla a los cambios que se producen.