VALÈNCIA. (EP) La Diputación de Castellón aprobó esta semana un aumento de 2,6 millones de euros de las inversiones en carreteras hasta alcanzar una inversión total de 9 millones de euros para 2018, cuatro vez más que la realizada en 2012, cuando destinó 2,6 millones a este capítulo.
El incremento de un total de 2.635.734,91 euros se destinará a cinco actuaciones de mejora de tramos de carreteras incluidas en el contrato de gestión integral, mantenimiento, conservación y modernización de la red de carreteras, cuya titularidad ostenta la Diputación de Castellón.
En primer lugar, la CV-105, de La Sénia a Torremiró por Castell de Cabres, con una ampliación de la calzada y una mejora de la seguridad vial, en el término municipal de La Pobla de Benifassà, con una inversión de 650.000 euros. La CV-105, de La Sénia a Torremiró por Castell de Cabres, se pavimentará con 175.000 euros.
Por su parte, la CV-105, de La Sénia a Torremiró por Castell de Cabres, acogerá un refuerzo del firme y la señalización, trabajos presupuestados en 895.000 euros. En cuarto lugar, la CV-200 de Segorbe a Aín por Castellnovo y Almedíjar, ampliará la calzada y mejorará su trazado, dentro del término municipal de Almedíjar, con una inversión de 450.000 euros.
Finalmente, la CV-207 de Barracas a Puebla de Arenoso por Fuente La Reina, también obtendrá la ampliación de la calzada y una mejora de la seguridad vial en el término municipal de Puebla de Arenoso, gracias al presupuesto de un total de 465.734 euros.
En total, las cinco actuaciones comprenden la mejora de 17,3 kilómetros de carreteras en comarcas en las que la Diputación de Castellón ve fundamental potenciar las comunicaciones para mejorar las oportunidades tanto de los vecinos y las empresas como para facilitar la acción de 'Repoblem' con la implantación de nuevas empresas que generen más empleos y la consolidación de la población.
De acuerdo al presidente de la Diputación, Javier Moliner, esta inversión tiene como objetivo "poner las cosas lo más fáciles posible a quienes deciden quedarse a vivir en el pueblo", así como "animar a otros muchos a que los visiten cuanto más mejor".
También para consolidar población en el interior de la provincia, Moliner defiende la necesidad de mejorar las comunicaciones de los pueblos de Castellón". "Facilitar la llegada y que los propios vecinos que desarrollan su trabajo en otros municipios reduzcan tiempos en sus desplazamientos y ganen en seguridad es sumar potencial de crecimiento a nuestro territorio", aseveró.
Con esta medida, la institución provincial castellonense trata de consolidar su apuesta por convertir los viales provinciales en "auténticos puentes de desarrollo y de generación de oportunidades' del ámbito urbano al rural", al hilo de su compromiso de mejorar las comunicaciones de las zonas menos pobladas de la provincia.