VALÈNCIA. La concejalía de Huerta y Pueblos de València ha firmado un convenio con la Unión de Agricultores y Ganaderos para dinamizar la actividad ganadera en el término municipal de València, donde actualmente sólo quedan dos rebaños de ovejas, con la singularidad que se tratan de rebaños de una especie autóctona: la oveja Guirra. Si bien, uno de estos rebaños pertenece en la Universitat Politècnica de València, y los animales son ejemplares que se utilizan únicamente para el estudio y el mantenimiento de la raza.
Por tanto, tal como ha explicado y la concejala delegada de la Huerta, Consol Castillo, "la realidad es que sólo queda un rebaño en activo al término municipal de València puesto que en los últimos diez años han desaparecido en Valencia tres rebaños de ovejas y cabras, y todo hace pensar que han sido expulsados por la elevada presión urbanística de sus alrededores".
Consol Castillo ha apuntado "que esta tendencia de desaparición de rebaños y pastores no cambiará a no ser que pongamos remedio". Y por eso, ha aclarado, «hemos decidido poner en marcha este plan que trata de dar cumplimiento a lo que dice el reglamento de la producción ecológica, en el que se expresa claramente que no puede haber rebaño criado sin tierra y que tampoco tendría que haber cultivos sin rebaño, puesto que cierran el ciclo de materia orgánica y son unos sistemas muy eficientes energéticamente hablando». Por una parte la ganadería puede aprovechar los restos de determinadas cosechas y así evitar destrucciones de las mismas de forma perjudicial al medio ambiente como por ejemplo la crema de estos restos. Y por otra parte, la agricultura puede beneficiarse de los restos orgánicos en forma de estiércoles provenientes del rebaño.
“Además –tal como ha resaltado Consol Castillo- también es importante la conservación del rebaño autóctono porque contribuye a evitar la pérdida de la agro-biodiversidad". "Sin ovejas los terrenos son invadidos por arbustos y pierden riqueza específica y biodiversidad. También aumenta la probabilidad y la intensidad de incendios y disminuye la disponibilidad de aguas en las cuencas, sobre todo en medios mediterráneos y semiàridos, como el nuestro. Por lo tanto, a nivel de ciudad y urbanizaciones la ganadería tiene un papel importante en el pasto de zonas periurbanas para el control de la biomasa".
El convenio contempla la creación de uno de matadero móvil para la ciudad de Valencia vinculado al de Mercavalència, para facilitar la tarea a los ganaderos, señalizar las vías pecuarias, el diseño de un obrador compartido y la propuesta de introducir rebaño en puntos estratégicos de cara al control de la demasiada forestal y arbustiva, como en el barranco de Benimàmet y Carraixet, el nuevo cauce del río Túria y determinadas zonas de urbanizaciones con demasiado forestal.
Por último, Consuelo Castlillo ha explicado que la recuperación de la ganadería en Valencia "trae implícita la creación de puestos de trabajo relacionados con mataderos, carnicerías, salas de despiece, distribución y pastores; así como pequeñas empresas de transformación artesanas cómo puedan ser queserías y otros derivados lácteos».
En cuanto a la oveja autóctona valenciana, que está incluida dentro del Catálogo Oficial de Razas Ganaderas del Estado Español en la categoría de razas en peligro de extinción, la concejala ha manifiesta «que hay que conocerla y mimar-la para no perder una parte tan importante de nuestro patrimonio natural y, la consiguiente pérdida de biodiversidad».
Respecto a sus características, la concejala ha explicado que la lana Guirra «es mucho más dulce al tacto y es la preferida por la gente que hace artesanía en lana, circunstancia que también podría contribuir a aflorar una actividad artesanal conexa que también se ha ido perdiendo a lo largo del tiempo».
La Guirra es una oveja muy poco conocida entre los valencianos y las valencianas. Es difícil poder llegar a consumir la carne de estos animales de forma consciente puesto que a ninguna carnicería la tienen como producto diferenciado, por eso, este proyecto también tiene como objetivo introducir la identificación de la procedencia de los productos ganaderos a los puntos de venta de la de València.
Otra característica de esta oveja es que es de aptitud mixta, es decir, que es buena tanto para la producción de carne como de leche. Su producción lechera no puede equipararse a la de las razas puramente lecheras, pero si que hay experiencias de ganaderos que las ordeñan y se hacen quesos de excelente calidad de la leche de estos animales.
“Por lo tanto, sólo queda completar esta producción con el aprovechamiento y la puesta en valor de la lana, que actualmente es un subproducto que se destruye con un coste para el ganadero y que puede tener una salida comercial con la creación directa de puestos de trabajo”, ha concluido Castillo.