VALENCIA. Eduardo Baviera -por partida doble-, la familia Nebot y Pablo y Ana Serratosa pueden presumir de ser los empresarios valencianos con mayor patrimonio en sus respectivos vehículos de inversión a día de hoy, según ha podido saber este diario. Precisamente en un momento donde crece la incertidumbre sobre el futuro de las sicavs tras seguir con un Gobierno provisional y las posibilidades de que el bloque de izquierdas salga victorioso tras el nuevo fracaso de Mariano Rajoy por formar Gobierno. Así se explica que cada vez sean menos las que ven la luz y más las que se están liquidando y/o fusionándose como viene informando este diario.
Grattarola Inversiones, la sicav de los hermanos Serratosa, ha entrado en septiembre con un patrimonio de 53,3 millones de euros, lo que la sitúa en lo más alto del ranking entre las 150 sociedades detectadas por este Valencia Plaza tras rastrear más de un millar de las 3.300 que circulan actualmente por España. Gestionada por Deutsche Asset Management y Lombard Odier -dos firmas de talla mundial-, y domiciliada en Madrid registraba una caída anual del 1,2% a fecha de antes de ayer.
A continuación se deja ver Rex Royal Blue de la familia Nebot Pellicer, gestionada por el Urquijo -la división de grandes patrimonios del Banco Sabadell- y asesorada por la EAFI valenciana Buy & Hold, cuyo patrimonio ronda los 40 millones de euros. La rentabilidad acumulada en lo que va de año de esta sociedad domiciliada en Madrid -y como todas las que figuran en este artículo cotizando en el segmento específico del Mercado Alternativo Bursátil (MAB)- alcanzaba el 2,5%.
Eduardo Baviera, cofundador junto a su hermano Julio de Clínica Baviera, ha visto como sus dos vehículos de inversión están en lo más alto del ranking por rentabilidad, mientras que ocupan la tercera y cuarta posición en lo que a patrimonio se refiere. Así, Tortuga 2014, la más joven de las dos y gestionada por Andbank, mueve actualmente algo más de 32 millones de euros y ofrece una rentabilidad anual del 11,2%. Tamaña revalorización solo es superada por su 'hermana' Alcestis Investments (+15,8%), ambas domiciliadas en Madrid donde vive este empresario de origen torrentí.
Por su parte, Alcestis Investments, que va camino de alcanzar los 31 millones de euros, está gestionada por A&G Banca Privada, una entidad independiente que ha echado sus redes en Valencia en busca de clientes y banqueros bajo su modelo de negocio donde no se les fija objetivos comerciales o de captación. Actualmente con una rentabilidad del 15,8% lidera el ranking de las sociedades de los empresarios de toda la Comunitat Valenciana. O cuanto menos los que ha localizado este diario y que mensualmente se publican en la Revista Plaza.
La quinta posición del ranking patrimonial es para Valores Tradicionales, cuya gestión está en manos de Egeria Grupo Gestión fundado por el financiero valenciano Carlos Castellanos y el único con gestora autóctona propia. Esta sicav no tiene un dueño en concreto sino que son varios empresarios -obviamente todos clientes de la propia Egeria- los que forman parte de esta sicav. Al cierre de este martes contaba con un patrimonio de 24,4 millones de euros y acusaba una suave caída del 0,2% en su rentabilidad anual.
Precisamente Valores Tradicionales es una de las no pocas que han anunciado -o que ya lo han hecho- su fusión con un fondo de inversión en España ante la cada vez mayor incertidumbre que se cierne sobre estas sociedades. Concretamente está en proceso de fusión con el fondo Egeria Coyuntura, tal y como adelantó Valencia Plaza a finales de julio pasado.
"Que un fondo y una sicav se fusionen en estos tiempos entra en la lógica ante los posibles cambios fiscales que afecten a las sociedades de inversión de capital variable. Al final pudiera ser que todo siguiera igual pero viendo lo sucedido en el País Vasco y Navarro cada vez son más los tenedores de una sicav que optan por la fusión", advertía entonces un gestor de fondos de inversión consultado por este diario.
Y no le faltaba razón entonces porque la inestabilidad política sigue pesando -y mucho- en el ánimo de todos aquellos que tienen -o quieren constituir- una sicav. La no investidura de Mariano Rajoy como presidente deja la puerta abierta a nuevos pactos de aquí hasta diciembre cuando se celebrarían unas terceras Elecciones Generales caso de no alcanzarse ninguno. Pero la posibilidad de un pacto del bloque de izquierdas, que no les temblaría el pulso a la hora de 'rematar' a las sicavs, sigue siendo una amenaza latente para estas sociedades.
Por lo pronto, el Partido Popular y Ciudadanos llegaron a un acuerdo a finales de agosto pasado para tratar de acabar con el Gobierno en funciones y para ello firmaron una serie de propuestas recogidas en el documento llamado '150 compromisos para mejorar España'. Y, entre ellas, figuraban dos específicas para estas sociedades enfocadas a los grandes patrimonios pero donde pueden participar los minoristas al cotizar en el MAB.
Las dos iniciativas eran devolver a la Agencia Tributaria el control fiscal de las sicavs -actualmente bajo la jurisdicción de la CNMV- y computar a efectos del número mínimo de 100 accionistas los que tengan una participación superior al 0,55% son las dos premisas que fijaron el PP y C's. Algo que ya era conocido porque figuraban en las propuestas de ambas formaciones políticas en su campaña electoral del pasado 20 de diciembre como publicó Valencia Plaza entonces. Sin embargo, no hubo mayoría absoluta en el Congreso, Rajoy volvió a fracasar... y las sicavs a quedarse todavía más en el aire.