VALÈNCIA. El sector bancario español estaba en pleno proceso de desapalancamiento cuando estalló la crisis pandémica, cuyos daños colaterales han intensificado el cierre de sucursales. Así vuelve a dar cuenta el último informe 'Las entidades de depósito en la Comunitat Valenciana' de la conselleria de Hacienda y Modelo Económico de la Generalitat Valenciana, que colgó ayer en su web el correspondiente al tercer trimestre de 2021. Y los datos no dejan lugar a la duda.
El número de oficinas que han pasado a mejor vida en la Comunitat Valenciana desde el estallido de la crisis pandémica -primer trimestre de 2020- es de 298. O lo que es lo mismo: el 12,96% mientras que eran 2.002 las que seguían operativas a 30 de septiembre pasado. Un porcentaje ligeramente superior al del 13,73% de la red comercial destruida en todo el territorio nacional, que a esa fecha totalizaba 20.330 tras perder 3.235 con la aparición del coronavirus.
La provincia valenciana, siempre según la información recabada por este diario de la web de la conselleria dirigida por Vicent Soler, es la más afectada en términos absolutos. El número de sucursales se ha reducido en tiempos de la covid-19 en 141, un 11,73% del total autonómico, hasta las 1.061 desde las 1.202 del primer trimestre de 2020.
Por su parte, Alicante lidera el recorte en términos porcentuales con un 16,26%, que en números absolutos es de 134, al pasar de las 824 oficinas a las 690 del último día de septiembre de 2021. En el caso de la provincia de La Plana, la red comercial se ha reducido un 8,39%, lo que equivale a 23 sucursales menos, que comprenden desde las 274 a las 251.
Unos números descendentes que van a tener continuidad ante los Expedientes de Regulación de Empleo (EREs) en marcha de la banca española. Sin ir más lejos, tal y como avanzó Valencia Plaza la semana pasada, CaixaBank cerrará una docena de establecimientos en la Comunitat Valenciana el próximo 24 de enero.
A la entidad dirigida por Gonzalo Gortázar hay que sumar los cierres de oficinas procedentes de BBVA, Banco Sabadell, Unicaja Banco, Liberbank, Ibercaja... en un sector que pide a gritos que el Banco Central Europeo (BCE) comience a subir los tipos de interés aunque tendrá que esperar, como mínimo, al año que viene según la última comparecencia de Christine Lagarde.
Mientras tanto, el informe de la Conselleria de Hacienda y Modelo Económico de la Generalitat Valenciana recoge que tanto los depósitos como los créditos al sector público y residente de la banca que opera en la autonomía crecieron en los nueve primeros meses del pasado ejercicio. Y en ambos casos por encima de la media nacional, tal y como se observa en la segunda imagen.
Así, los depósitos lo hicieron a un ritmo anual del 5,61% hasta totalizar 125.481 millones de euros frente al 5,48% de crecimiento en todo el territorio español, cuyo importe ascendió a 1,44 billones de euros. La Comunitat Valenciana se mantuvo en el cuarto puesto del ranking por detrás de Madrid (387.715 millones), Cataluña (207.857 millones) y Andalucía (145.577 millones).
En lo que a créditos se refiere, la banca que opera en la Comunitat Valenciana concedió 114.587 millones de euros, lo que representa un incremento anual del 3,24%. En toda España el repunte fue de solo un 1,07% para situarse en los 1,25 billones de euros. Idéntica posición en el ranking nacional, cuarto puesto, tras Madrid (360.272 millones), Cataluña (210.345) y Andalucía (153.058 millones).