VALÈNCIA. La dimisión de José Manuel Pérez Tornero como presidente de la Corporación de RTVE el pasado mes de septiembre dejó varias incógnitas sobre la mesa. Entre ellas, qué ocurriría con el futuro centro territorial de Valencia que él mismo y el president de la Generalitat, Ximo Puig, acordaron que se ubicaría en el recinto de la antigua Facultad de Magisterio propiedad de la Universitat de València (UV), frente a la Ciudad de las Artes y las Ciencias, después de que el Gobierno valenciano adquiriera el edificio por 16 millones de euros.
Aquella cita de junio entre ambos sirvió para suscribir un protocolo de intenciones con el objetivo de la adquisición y cesión de un espacio para "ampliar los servicios y las prestaciones del centro territorial", según trasladó la Generalitat en un comunicado. Con Tornero fuera del ente, sin embargo, se desconocía cuál sería el futuro de esta operación. Pero los Presupuestos Generales del Estado de 2023 han puesto negro sobre blanco: la propia Corporación ha presupuestado un total de 8 millones de euros para continuar con su objetivo de unificar sus centros territoriales.
De esta cantidad, para 2023 el ente contará con 339.00 euros, de los cuales 260.000 euros servirán para hacer "actuaciones HD-UHD" y el resto lo harán para "comunicaciones corporativas". Mientras el grueso del presupuesto, esos casi 8 millones de euros, se encuentran como partidas plurianuales repartidos entre 2024 y 2025, que se destinarían exclusivamente a la citada unificación. Para estos dos ejercicios, el ente público preve 4,7 millones y 3 millones de euros, respectivamente.
Los tiempos marcados en las cuentas son una muestra, en cierto modo, de los márgenes temporales con los que se pretende realizar una maniobra de este calado: desde la redacción del proyecto que se pretenda acometer, la licencia municipal -en un ayuntamiento, el de València, que está tardando años en conceder algunas-, hasta la construcción del edificio que albergará los estudios de radio y televisión que, además, funcionarán como un centro de producción de programas como ya ocurre con otros centros territoriales de España.
La antigua Facultad de Magisterio es un "inmueble histórico" de la ciudad de València con una superficie alcanza los 26.000 metros cuadrados hábiles. No obstante, desde RTVE se especificaba en una nota de prensa que la "actuación principal" consistirá en "la construcción de un edificio singular anexo" que, por una parte, comunicará con el actual inmueble del Master d’Educació Secundaria, y por otra parte se fusionará con el actual pabellón deportivo, transformado en plató de televisión, que a su vez permitirá las vistas al skyline de Valencia, concretamente a la Ciudad de las Artes y las Ciencias, que podrá convertirse "en el telón de fondo de muchas retransmisiones, potenciando el valor de la ciudad". Los espacios exteriores serán fácilmente accesibles para la utilización de vehículos, transporte de material, escenarios, etc., y unidades móviles.
Según este comunicado, la ocupación para el nuevo centro territorial, que permitirá además la unificación de las sedes de TVE y RNE en una única infraestructura, prevé una superficie aproximada de 5.000 metros cuadrados, con 3.000 m2 de superficie construida más 2.000 m2 de urbanización para accesos y aparcamiento. Constará de un estudio de TV con los controles técnicos asociados situados en el actual pabellón deportivo, un nuevo edificio técnico con los controles locutorios de radio (3 parejas de controles-locutorios y un autocontrol), así como las áreas técnicas asociadas a la producción.
En 2012, Radiotelevisión Española (RTVE) comenzó un plan para unificar sus centros territoriales de radio y televisión. Sin embargo, diez años después en la Comunitat Valenciana todavía no se ha acometido a pesar de que prácticamente cada año los PGE reservan partidas para acometer este compromiso. De hecho, en 2017 el Ejecutivo de Mariano Rajoy incluyó en el capítulo de inversiones 2,94 millones de euros para unificar "TVE y RNE Valencia" y acometer la "obra civil" y contar con el "equipamiento técnico" para ello.
En aquel momento la partida era más baja porque se barajaba el traslado al Centro de Producción de Programas de Burjassot, actual sede de À Punt. Sin embargo, aquella idea no entusiasmó a la entonces directora de la cadena, Empar Marco, y finalmente terminó descartándose el traslado a estas instalaciones, que requerían menos inversión en obras y equipamiento de lo que requeriría ahora el edificio elegido.