VALÈNCIA (EP). El PSOE y Unidas Podemos han acordado finalmente que en la mesa del diálogo social para negociar con los agentes sociales la reforma laboral, además del Ministerio de Trabajo que lidera la vicepresidenta segunda, Yolanda Díaz, se sienten representantes de la Vicepresidencia primera de Asuntos Económicos de Nadia Calviño y del Ministerio de Inclusión y Seguridad Social de José Luis Escrivá, como defendía el ala socialista.
Eso sí, antes de que se vuelva a reunir esa mesa el próximo miércoles, ahora ya con representantes del PSOE, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, reunirá el próximo 2 de noviembre a Calviño, a Díaz, y a los ministerios de Hacienda, de Seguridad Social y Educación y FP "para fijar la posición del Gobierno en la mesa de diálogo social, en los términos del acuerdo de Gobierno de coalición", según ha informado Moncloa.
Precisamente la vicepresidenta Díaz había pedido este lunes que se abriera un debate dentro del Gobierno para delimitar el contenido de la reforma, aunque ella ya lo consideraba cerrado, ante la petición de otros Ministerios de sentarse también en la mesa del diálogo social. Según los 'morados', las diferencias en la coalición no sólo tenían que ver con la metodología de trabajo, como afirma el PSOE, sino también con los contenidos.
Con el acuerdo de este miércoles, los socios de la coalición han llegado a un punto intermedio en sus exigencias para abordar una reforma que ambas organizaciones consideran crucial, y cuya gestión ha generado una de las peores crisis internas en el Ejecutivo en lo que va de legislatura.
En concreto, Díaz ha aceptado que en la mesa del diálogo social entren ahora representantes de otros ministerios con materias afectadas; ministerios que precisamente son del ala socialista. Esa mesa lleva trabajando desde marzo con los sindicatos y la patronal, y la única representación del Ministerio de Trabajo, para pactar un nuevo marco de relaciones laborales que suponga la derogación del anterior diseñado por el PP.
Y por otro lado, el presidente del Gobierno ha convocado una reunión de esos ministerios afectados para llegar a la cita del miércoles con sindicatos y patronal con una posición conjunta.
A este respecto, el ala socialista sigue defendiendo que todo el Gobierno está "alienado" en el contenido de la reforma laboral. Aún así, ha aceptado finalmente que se celebre esa reunión conjunta, presidida por Sánchez, el próximo martes 2, con la presencia de Díaz y Calviño y los ministros de Hacienda, María Jesús Montero; de Seguridad Social, José Luis Escrivá; y Educación, Pilar Alegría.
Asimismo, según ha informado Moncloa, todos los martes a las 17.00 horas se celebrará una reunión para fijar la posición del Gobierno en esa mesa de diálogo. A esa reunión asistirán los secretarios de Estado de Empleo, Economía y Seguridad Social y Pensiones. Esas mismas personas se reunirán también los miércoles por la tarde para analizar el desarrollo de la mesa y coordinar el trabajo de preparación de la siguiente mesa de diálogo.
Y cuando sea necesario por la importancia o complejidad política de los asuntos, se producirán reuniones a nivel de vicepresidentas y ministros, que se celebrarán, con carácter general, inmediatamente antes o después de la Comisión Delegada del Gobierno para Asuntos Económicos, para facilitar la coordinación de agendas.
De este modo se cumple también la pretensión de Moncloa de mejorar los mecanismos de coordinación entre los diferentes ministerios afectados, para lograr que esa reforma laboral que consideran una "ley de legislatura" se haga con el mayor consenso posible y la implicación del Gobierno "en su conjunto".
A pesar de que este lunes el ala socialista del Gobierno reconoció públicamente el liderazgo de Díaz, como ministra de Trabajo, en la mesa del diálogo social, Unidas Podemos no había aceptado todavía lo que Moncloa pedía a cambio y que ahora sí ha asumido: que en esa mesa se siente también el PSOE, a través de representantes de otros ministerios afectados por las materias que toca la reforma laboral.
En concreto, la delegación del Gobierno en esa mesa de diálogo social --que se seguirá reuniendo cada miércoles por la mañana--, seguirá estando encabezada por el secretario de Estado de Empleo, pero ahora también se sumarán un director general de Asuntos Económicos y otro de Seguridad Social. Además, en función de los temas que se traten, podrán acudir representantes de los otros Ministerios afectados.
Por su parte, Díaz ha expresado su "satisfacción" por el "acuerdo sobre la necesidad de abordar los contenidos de la reforma laboral". "Doy las gracias a los equipos negociadores porque por fin vamos, de nuevo, a fijar los límites, el alcance de la reforma laboral más importante que vamos a hacer del mercado de trabajo en nuestro país", ha dicho desde Roma.
La ministra de Trabajo también ha agradecido a Sánchez su disposición para presidir la reunión. "El presidente que representa a todo el Gobierno nos permitirá volver a hablar, una vez más, del alcance y los contenidos de la reforma laboral", ha expresado.
Díaz también ha sentido la polémica con Calviño a raíz de la reforma laboral y ha insistido en que "lo importante no es el quién, es el qué". No obstante, ha vuelto a defender que la metodología no es el problema, como había señalado la vicepresidenta primera.
"Esta metodología le ha llevado al Gobierno a alcanzar acuerdos sociales. Yo pensaba que (las negociaciones) estaban cerradas, hemos remitido el componente 23 (a Bruselas) y pensaba que estaban cerradas", ha remarcado la ministra.
El Ejecutivo autonómico llega a un acuerdo con el central por el artículo que todavía permitía los contratos por obra y servicio, que chocaba con la reforma laboral