VALÈNCIA (EFE/Laura Zornoza). La eurodiputada valenciana Sira Rego (IU), recién nombrada candidata del grupo de la Izquierda a presidir el Parlamento Europeo, tratará de aunar los apoyos del bloque progresista en este hemiciclo en el caso de que los socialdemócratas o los Verdes opten por no nominar a nadie para este cargo.
Así lo explica la diputada en una entrevista con Efe tras ser elegida por su grupo para competir por este cargo, que debe renovarse en enero; en la carrera, por el momento, están la popular Roberta Metsola y el conservador Kosma Złotowski, pero nadie del bloque de corte más progresista de la Eurocámara.
“Desde luego, vamos a intentarlo. Nosotros tenemos una agenda que tiene muchos elementos que son de sentido común de mucha gente demócrata aunque no compartan el 100 % de nuestro programa político”, valoró Rego, que se refirió en concreto a la defensa de los derechos de las mujeres, LGTBIQ+ o la lucha contra el cambio climático.
Los socialdemócratas están ahora en búsqueda de una “mayoría alternativa” a la candidata popular, favorita para hacerse con el cargo, pero no han confirmado que esto suponga postular un nombre, mientras que los Verdes no se han pronunciado al respecto y hace dos años no presentaron ningún candidato.
“Yo creo que tenemos en agenda muchísimos ingredientes que pueden hacer que en un momento dado sí haya un cierto consenso, unos ciertos apoyos”, añade.
Por el momento, subraya Rego, no ha tenido ningún contacto con el resto de fuerzas progresistas de la Eurocámara de cara a buscar una mayoría en apoyo a un candidato y su grupo se está centrando en el “planteamiento político”, que ve “más importante que nunca teniendo en cuenta la correlación de fuerzas que hay ahora en el Parlamento Europeo”, de corte más conservador.
Para la diputada de IU, los recientes intentos de los grupos de ultraderecha del Parlamento -actualmente divididos- de juntarse en una sola formación que sería la tercera más poderosa de la Eurocámara “puede alertar” con respecto a determinadas cuestiones que plantea la ultraderecha que “terminan generando apoyos por parte de socialdemócratas, populares o liberales”.
“Cuando entramos en el terreno de la defensa de derechos como el aborto o de las personas LGTBI, es cierto que muchos grupos se posicionan en contra de planteamientos ultrarreaccionarios de determinados gobiernos europeos, pero la línea empieza a ser más difusa cuando entramos en otro terreno que tendría que ser igual de exigente, como lo que está sucediendo con las políticas migratorias europeas”, advierte Rego.
“Ahí estamos viendo que no hay tanto problema con alinearse con posiciones de la extrema derecha y que las instituciones europeas hacen suya la agenda de la extrema derecha”, insiste.
Este fenómeno, advierte Rego, “es un peligro”. “De esto hay que alertar porque al final cuando pelamos por los derechos humanos no peleamos por el derecho de un ‘otro’, sino que nos interpelan a todos y a todos. Con esto hay que ser exigente y marcar una línea roja”, concluye.
La candidata de la Izquierda llevará en su campaña la necesidad de un papel “mucho más activo e importante” para la Eurocámara, ya que considera una “anomalía” que el organismo europeo directamente elegido por los ciudadanos tenga “una función un tanto mermada”.
“Es una oportunidad, ahora que se ha abierto el debate sobre el futuro de Europa, llevar una propuesta en la que se plantee que el Parlamento tenga iniciativa legislativa. Nosotros insistimos en que hay que pelear y plantear medidas concretas que profundicen en la democratización de las instituciones”, subraya.