VALÈNCIA. La Conselleria de Política Territorial ha iniciado el trámite para resolver de forma anticipada la Actuación Estratégica Territorial (ATE), cuyo plazo expira en mayo de 2025 ante los incumplimientos del Valencia CF con los hitos fijados en el desarrollo urbanístico. No obstante, será el pleno del Consell del próximo viernes 19 de noviembre el que deberá dar luz verde a esta decisión para iniciar el procedimiento que dará por caducada la actuación.
Esta decisión de la Conselleria se adopta en base al informe de la Abogacía de la Generalitat Valenciana que instaba a la Generalitat a tomar una decisión sobre la ATE en caso de que el club que preside Anil Murthy no ofreciera compromisos reales con el desarrollo del nuevo estadio. Así, el documento remarcaba que la Administración valenciana tenía "la obligación jurídica de resolver anticipadamente" la actuación urbanística dados los informes técnicos que hay encima de la mesa por parte de las diferentes administraciones y los sistemáticos incumplimientos del promotor, el Valencia CF.
Las opciones que planteaban los abogados de la Generalitat para resolver la actuación eran dos: o bien la sustitución del promotor, que en esta caso sería del Valencia CF, o la declaración de caducidad de la actuación, la vía que ha decidido adoptar Territorio ante la ausencia de movimientos por parte de la entidad valencianista. Según la Abogacía, la caducidad de la ATE no requiere el transcurso total del plazo, es decir hasta 2025, para ser acordada e implica necesariamente la resolución anticipada de la ATE.
De hecho, tras conocerse ese informe de Abogacía, Territorio esperaba algún movimiento por parte del club, pero ante la ausencia de garantías reales se ha decidido iniciar el trámite para dar por finalizada la ATE. Además, este pasado miércoles Economía volvía a denegar la prórroga de la ATE que había solicitado el club para ampliar el plazo cinco días más. Un rechazo que daba por cerrada la vía administrativa y que también ha llevado a Territorio a iniciar el procedimiento.
Un trámite que empezará cuando el pleno del Consell apruebe darle inicio y que no podrá revocarse pese a que el Valencia presente algún aval durante el proceso, explican fuentes del departamento que dirige Arcadi España. De esta forma, una vez abierta la caducidad de la ATE, seguirá adelante. No obstante, ello no quiere decir que el nuevo estadio no se vaya a construir, sino que el promotor pierde las ventajas que ofrece la figura urbanística de la ATE.
De hecho, el propio informe de la Abogacía de la Generalitat señalaba que Territorio tendrá la potestad de decidir si se mantienen o no las previsiones de planeamiento y tiene la posibilidad de derogar unas previsiones y mantener otras, todo ello de forma motivada y basándose en el interés general. Por tanto, el Valencia aún podría seguir como promotor de la actuación, pero, eso sí, sin la ATE, y siempre y cuando la Generalitat detecte que su plan cuenta con un aval y un compromiso más allá de buenas intenciones.
La Actuación Territorial Estratégica (ATE) suponía una recalificación de suelo a terciario, una suerte de 'pelotazo' urbanístico en favor del club que le otorgaba el derecho a construir un terciario de 68.000 metros cuadrados -que bien podría haber sido un centro comercial-. La actuación recoge, por tanto, un "plus de derechos urbanísticos y de edificabilidad", en palabras de la edil de Urbanismo del Ayuntamiento de València, Sandra Gómez, que se aprobó en su momento pero que ahora sería "impensable" a juicio de los responsables municipales, dado que se aprobó sobre el PAI de Mestalla, que ya había recalificado una bolsa importante de suelo a residencial.
"La principal función de la ATE fue dar un plus sobre unos terrenos ya recalificados. El Valencia quiso más y la administración valenciana se los dio", explicó Gómez en este sentido. Y es este plus, el terciario, casi lo único que se perdería con la caducidad de la ATE. Las pérdidas para el club, traducidas a términos económicos, ascenderían a una horquilla de entre 15 y 25 millones de euros al perder esta calificación de terciario.
Tras conocerse esta decisión de Territorio, el Valencia CF mostraba su desacuerdo y aseguraba que acabará el estadio con esa ayuda o sin ella. La entidad está a la espera de que se cierre el acuerdo entre el fondo CVC y LaLiga, lo que le supondrá una inyección de más de cien millones de euros para poder retomar las obras. Por tanto, ve inoportuno decretar la caducidad de la ATE en esta situación.
De hecho, el club considera que lejos de ayudar a resolver un problema que afecta al club pero también a la ciudad de València, la decisión puede dificultar la solución aunque reitera su decisión de acabar la infraestructura.