VALÈNCIA (EP). El Ayuntamiento de València ha aprobado este jueves inicialmente, en el pleno ordinario de noviembre, su presupuesto para 2023, que asciende a 1.042.869.604,42 euros y crece en 32 millones sobre el de 2022. Las cuentas han salido adelante con el sí del equipo de gobierno que forman Compromís y PSPV y con el rechazo de la oposición: PP, Cs y Vox.
El presupuesto, aprobado el lunes en la Junta de Gobierno Local y posteriormente en la Comisión de Hacienda, se someterá tras el visto bueno provisional del pleno, a exposición pública para recibir alegaciones y acordarse de manera definitiva antes de que acabe el año.
El alcalde, Joan Ribó (Compromís), ha asegurado durante el debate de las cuentas que son "un presupuesto expansivo" que supera, como sucedió ya con el de 2022, "los mil millones de euros". Ha valorado que sea así "en un contexto de subida de precios y de recuperación postpandemia".
"Tiene muy en cuenta la situación de incremento de precios y su repercusión en personal, consumo de energía y contratos", ha dicho el primer edil, que ha expuesto que es "el presupuesto mejor dotado" del consistorio y ha valorado la gestión "honrada, responsable y eficiente" del ejecutivo que preside.
Ha resaltado también el aumento "del gasto social, del apoyo a los sectores productivos y la mejora de los servicios al ciudadano", así como "el esfuerzo inversor en barrios y pueblos" y la reducción de la deuda --en un 70% desde 2015 y para acabar con 230 millones al concluir 2023, ha detallado--. Ha agregado que el dinero que no se destina a préstamos se dirige a "mejorar el bienestar de la ciudadanía".
Igualmente, ha destacado que en las cuentas de 2023 se incorpora la segunda anualidad de los Next Generation, unos 35 millones; la primera aportación del Ayuntamiento por las obras del canal de acceso ferroviario de la ciudad, 31,4 millones; y los ingresos y gastos por la gestión de inmuebles de patrimonio de la ciudad en la Marina, 4,8 millones.
Ribó ha explicado que hay un incremento de ingresos por la subida e las entregas a cuentas del Estado y las de la Generalitat (principalmente contrato programa con Políticas Inclusivas y aportaciones para el empleo de Labora), por la inclusión de Next Generation y por nuevo endeudamiento (se reduce en 2 millones en 2023).
El responsable municipal ha añadido que hay congelación de tasas e impuesto y unas cuestas "saneadas" y ha subrayado que se incluye también la asunción por parte del Ayuntamiento del nuevo tributo del Gobierno por gestión de residuos. En gastos, ha apuntado aumentan en personal --ha hablado de nuevas contrataciones y del aumento salarial pactado con el Gobierno--. Además, ha mencionado la dotación destinada al nuevo contrato de zoonosis para combatir plagas.
Desde la oposición, el edil de Vox Vicente Montañez ha asegurado que los de 2023 son "los presupuestos de la miseria, la incertidumbre, el hambre y el frío" y ha anunciado una "enmienda a la totalidad", que no ha prosperado, para que los presupuestos "vuelvan a la cocina". "No falte a la verdad. Sus cuentos se convierten en pesadillas" para los valencianos", ha dicho al alcalde tras su intervención.
Montañez ha censurado que Alcaldía aumente sus gastos y ha lamentado la "absoluta falta de compasión con los ciudadanos", así como menor inversión en seguridad, limpieza, innovación y fomento de empleo, y las partidas que sigue absorbiendo la EMT. En alusión a esta última, el portavoz de Cs, Fernando Giner, ha asegurado que los de 2023 pasarán "a la historia por ser los presupuestos de la EMT".
"Ribó será muy laico pero cree en los milagros económicos, porque solo un milagro puede salvar la gestión" del presidente de la EMT y edil de Movilidad Urbana, Giuseppe Grezzi (Compromís), ha dicho Giner, que ha asegurado que "uno de cada 5 euros que los valencianos pagan este año, 1 va a la EMT". "Las inversiones no han caído por el canal de acceso, sí porque la EMT es un pozo sin fondo", ha apostillado.
Giner ha censurado que en las cuentas del consistorio haya un aumento "tímido" en limpieza y que la vivienda quede desatendida, a la vez que se ha mostrado partidario de "bajar impuestos, sobre todo, el de plusvalía". Ha considerado que se ha "perdido una oportunidad para universalizar el cheque escolar", ha reprochado al gobierno local el "déficit de plazas en residencias" para mayores y ha instado a mejorar el cuidado de los dependientes.
La portavoz del PP, María José Catalá, ha manifestado que los de 2023 son los presupuestos "de un fin de ciclo" y "los últimos que se hacen sin contar con las necesidades de los valencianos", en alusión a un posible cambio de gobierno tras las elecciones de mayo. Ha reclamado una bajada de impuestos y ha censurado el "afán recaudatorio" del ejecutivo municipal, también con las multas.
Catalá ha considerado que las cuentas de 2023 no miden el ciclo económico actual, ha pedido "un mínimo gesto con la gente de la calle" y ha acusado al equipo de gobierno de "insensibilidad absoluta". Ha criticado que el Ayuntamiento mantengan dinero en los bancos, buscando rendimiento y sin destinarlo a los ciudadanos. "Dejen de jugar al Monopoly", ha pedido al ejecutivo.
Asimismo, ha lamentado el "agujero negro" que supone la EMT y ha criticado que se reduzcan las partidas para seguridad o vivienda y que no se mejoren las listas en padrón o licencias. Con todo, ha calificado de "absolutamente incorrecta, precipitada y errática" la tramitación del presupuesto.
La oposición ha censurado que las cuentas de 2023 les hayan llegado con "poco tiempo" para analizarlas y el alcalde ha pedido disculpas "por el retraso en entregar" a la oposición "la documentación" referida al presupuesto y ha explicado que este se debió a la celebración de la Junta de Gobierno lunes y no viernes por su viaje a Suiza para recoger los galardones de Ciudades de Humedales Ramsar.-
Además, PP, Cs y Vox han criticado las partidas destinadas a "amiguetes" y "entidades pancatalanistas" y han citado a Plataforma per la Llengua o el Micalet.
En respuesta a la oposición, el edil de Hacienda, Borja Sanjuán (PSPV), ha negado que no se tengan en cuenta a la gente de la calle en los presupuestos y ha dicho que son "bastante más sensibles" que los del PP. Ha reiterado que al tener menos deuda hay más recursos para las prioridades y ha dicho que crece en actuaciones económicas y promoción social.