Hoy es 14 de octubre
VALÈNCIA. El empresario valenciano Enrique Bañuelos ha firmado un acuerdo para adquirir el fabricante sueco de vehículos eléctricos Inzile mediante intercambio de acciones. Bañuelos, a través de QEV Tech, participa junto a Inzile y otra compañías en un proyecto para convertir la planta de Nissan en Barcelona en una fábrica multimarca y multiproducto de coches eléctricos.
El acuerdo está condicionado a la aprobación de los accionistas de Inzile en junta general y al visto bueno del regulador del Nasdaq First North Growth Market, donde cotiza la firma sueca. Según informó Inzile en un comunicado, esta empresa comprará el 50% de la española QEV Tech Holdings -copropietaria de QEV Technologies -empresa que participa en el proyecto para reindustrializar la planta de Nissan-. Otra condición del acuerdo es que se constate que QEV Tech Holdings es propietaria de al menos el 51% de QEV Technologies, para que Inzile pueda consolidar sus resultados.
Al mismo tiempo, Inzile aprobará una ampliación de capital que permitirá, mediante una opa, a la sociedad eFashion Championship PTE (eFC) tomar el 63% de la compañía. Según detalla Inzile, eFC, propiedad al 100% de Bañuelos, controla el 100% de QEV Tech Holdings, por lo que el empresario saguntino controlará Inzile, que mantendrá su sede operativa en Suecia.
"El propósito de la adquisición por parte de eFC es, a través de Inzile, establecer un centro europeo líder para vehículos eléctricos y asegurar los recursos necesarios para una expansión global", explica el comunicado.
Como adelantó Valencia Plaza hace tres años, tras sus fracasos inmobiliarios en España y Brasil, su frustrado intento de promover el complejo BCN World en Cataluña y poco exitosa experiencia en Amper, el fundador de Astroc se embarcó en un proyecto industrial de vehículos eléctricos, mundo que conocía como promotor junto a Alejandro Agag del campeonato mundial de coches eléctricos Fórmula E.
Para ello, Bañuelos puso en marcha una planta de fabricación de coches eléctricos en Montmeló, donde tenía su base el QEV Technologies, socio técnico de la escudería india Mahindra Racing, que participa en el campeonato de Formula E. En el proyecto inicial estuvo involucrado el expiloto y empresario valenciano Adrián Campos.
QEV Technologies presentó el pasado mes de abril un proyecto para desarrollar y producir en cadena, en la fábrica de Nissan que quedará sin uso a final de año, un Small Electric Vehicle (SEV), orientado al uso privado, carsharing y reparto de última milla en su versión Cargo. El plan es compartir la planta con otros fabricantes de coches eléctricos, como Inzile.
El acuerdo ahora firmado contempla la expansión internacional de la compañía sueca en Sudamérica, Estados Unidos y Asia que incluye la apertura de una filial en EEUU, donde los derechos de propiedad intelectual de QEV Tech en relación con el mercado estadounidense serán transferidos a Inzile. La dirección de la empresa hasta ahora controlada por Ragnar Åhgren permanecerá en Suecia.
Inzile, fundada en 2012, fabrica vehículos inteligentes de propulsión eléctrica en una planta situada en la localidad de Västervik, y tiene el departamento de I+D en Tranas, ambas al sur del país.
"Para nuestro grupo, Inzile es la plataforma perfecta para consolidar empresas europeas de electromovilidad y realizar joint ventures internacionales, preferentemente en Estados Unidos y Latinoamérica", señala Enrique Bañuelos en el comunicado.