Restaurante Rioja 

Su personalidad analítica, perfeccionista y curiosa, en un universo como el de la paella, tan lleno de matices que pueden afectar al resultado final, desemboca en esta obra de arte de precisión milimétrica que es su paella valenciana. Esta pieza única es el resultado de cuatro generaciones de cocineros. Noventa y siete años esculpiendo un plato que derrocha profesionalidad y cariño. En cualquier ingrediente te vas a encontrar discurso y reflexión. Mucha pensada y aún más trabajo detrás de cada elección, de cada corte.  Verduras seleccionadas de su propio huerto. Pollos de más de 3 kg (carne más compacta). Cortes clásicos del pollo y del conejo que aportan ese sabor tan particular: cabeza, hígado, riñón de conejo... La mínima expresión de receta que se traduce en un sabor fino como pocos, combinación casi perfecta entre verduras y proteína. Y un punto, el del J.Sendra D.O. Arroz de Valencia, que da miedo de lo clavado que está.

En confianza: Dile a Vicente que te dé una vuelta por el edificio; además de ver su paellero (si hay paella a leña siempre hay que visitarlo), no te pierdas su bodega. Un pequeño santuario lleno de botellas míticas que poder degustar en alguna de sus catas privadas.