Usuarios de la Fundación Maides colaboran en la elaboración de una falla solidaria

VALÈNCIA (EP). La falla Santa María Micaela - Martín el Humano, de València, ha realizado la plantà de la falla solidaria de la Fundación Mare de Déu dels Innocents i Desamparats (Maides), que ha sido elaborada por voluntarios de la comisión fallera y usuarios de la entidad, dedicada a la atención integral de personas con enfermedad mental crónica y en situación de pobreza y exclusión social.

Esta comisión plantó la primera falla de Maides en 2015 y desde entonces han continuado esta iniciativa "con la que este año se da un paso más allá ya que ha sido confeccionada con vareta y representa una de las viviendas tuteladas de Maides y un gran corazón rojo que sobresale, como símbolo de la solidaridad que compartimos con ellos", ha explicado la vicepresidenta de Solidaridad de la falla, Paloma Serra.

El lema es 'Micaela suma' porque "queremos sumarnos, una vez más, a la solidaridad. El colectivo fallero es vecinal, abierto a la participación y podemos hacer mucho más dentro de la fiesta fallera, y por eso este año, como novedad, nuestra comisión pondrá a la venta un centenar de llaveros de madera, con forma de ladrillo, pintados por los usuarios de Maides, cuya recaudación se destinará a esta Fundación", ha señalado.

Es también, como la falla, "un ladrillo que suma, que construye este proyecto común que tenemos con Maides, y la idea es continuar haciendo más llaveros y que sigan vendiéndose para recaudar más fondos a lo largo del año", ha expresado.

La falla, al igual que en años anteriores, ha contado con la colaboración del artista fallero José Julio Riesco, fallero de esta comisión, que ha dirigido todo el proceso. En los meses previos, participantes de los programas de Maides realizan dibujos y carteles y colaboran en la elaboración de los ninots y elementos para la falla, con la ayuda de falleros voluntarios de Santa María Micaela, comisión vinculada a Maides desde 2003.

Aceite para Cáritas y productos para Ucrania

La solidaridad de los falleros de esta comisión está vinculada a la atención de enfermos mentales crónicos y en exclusión pero también a la crisis derivada de la guerra en Ucrania, concretamente, "a la necesidad que ha surgido en los últimos días por la falta de aceite".

La Cáritas de la parroquia San Pedro Pascual de Valencia "nos pidió movilizar a nuestros falleros para hacer una recogida solidaria de aceite y en unos pocos días hemos conseguido 130 litros, tanto de girasol como de oliva, que ya hemos entregado", ha indicado.

Por otra parte, Paloma Serra, fallera de Santa María Micaela, dirige dos centros de Educación Infantil, en Valencia y en Mislata, en los que ha promovido, "con la colaboración de numerosas familias y la implicación de las profesoras", un proyecto solidario de recogida de productos infantiles, tanto de higiene como de alimentación, para familias con niños en Ucrania.

La respuesta a esta iniciativa ha sido "estupenda, la gente se ha volcado: hemos conseguido llenar tres coches con muchos productos infantiles, y los hemos llevado al punto de recogida que ha establecido el Ayuntamiento de Mislata", ha señalado.