VALÈNCIA. El proyecto de conexión de la CV-60 con la N-332 y la AP-7 vuelve a generar controversia en la comarca de la Safor. En esta ocasión, la plataforma vecinal Per L'Horta de la Safor ha interpuesto un recurso contencioso-administrativo contra la Generalitat, en el que solicita al Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat Valenciana (TSJCV) la paralización cautelar de esta obra, que prevé enlazar Palma de Gandia con la Autopista del Mediterráneo y la rotonda entre Gandia y Bellreguard.
No es la primera vez que los vecinos expresan su malestar ante esta actuación. En 2022, la plataforma se manifestó en Gandia en contra de esta infraestructura que, según denuncian, "representa la destrucción de más de 600.000 m2 de huerta en la comarca". Con el recurso presentado ante el TSJCV, los vecinos insisten en que la obra "afectará de forma negativa al medio ambiente, el paisaje y el patrimonio de la región, transformando de forma irreversible un entorno de alto valor ecológico y agrícola". En declaraciones a Valencia Plaza, la portavoz de la plataforma, Sònia Fayos, ha señalado que el proyecto, impulsado desde la Conselleria de Medio Ambiente e Infraestructuras y en colaboración con el Ayuntamiento de Gandia, representa un "gasto millonario, que podría destinarse a otras infraestructuras prioritarias para la región".
Esta denuncia llega tras la licitación para encargar la redacción del proyecto, anunciada la semana pasada por el conseller de Medio Ambiente e Infraestructuras, Vicente Martínez Mus, en su visita a Gandia. Precisamente, en esta misma cita, el alcalde del municipio, José Manuel Prieto, defendió que la ampliación de la CV-60 "eliminará todo el tráfico pesado de nuestros pueblos", ya que conecta, de oeste a este, las comarcas de L’Alcoià, El Comtat, La Vall d’Albaida, La Costera, La Safor y La Marina. Sin embargo, el trazado de la infraestructura no termina de convencer a la plataforma vecinal, quien ha advertido del "devastador impacto ambiental" que conlleva una "obra tan faraónica como innecesaria".
Con ello, Fayos se ha referido a que la actuación implicaría cubrir con hormigón tierra fértil de los campos, "muchos de ellos en activo", por lo que supondría arriesgar la biodiversidad y el ecosistema comarcal en favor del desdoblamiento de la carretera. La portavoz también ha expresado su preocupación por los efectos en la salud de la población de la Safor, dado los cambios en el entorno y el aumento de la contaminación que podría traer consigo la nueva infraestructura. "Queremos más transparencia y que se informe a la ciudadanía sobre los impactos reales de este proyecto", ha enfatizado Fayos.
En el recurso presentado ante el TSJCV, la plataforma Per L'Horta de la Safor señala la "falta de acceso a documentación esencial del proyecto por parte de la Generalitat Valenciana". Según ha explicado su portavoz a este diario, el departamento de Martínez Mus no ha facilitado a la ciudadanía el expediente completo que detalla las alternativas estudiadas o el impacto ambiental de la infraestructura.
Al no haber obtenido dicho documento, la plataforma considera que "se obstaculiza su derecho a la tutela judicial efectiva y se dificulta la participación ciudadana en la evaluación del proyecto". Y es que esta documentación es "clave" para comprender por qué se ha dado luz verde a las obras de ampliación de la CV-60, según ha apuntado Fayos. Por otra parte y, en respuesta al proyecto oficial, Per L'Horta de la Safor sugiere otras opciones que buscan mejorar la infraestructura existente sin comprometer el entorno natural.
De esta manera, Fayos ha explicado a este diario que la plataforma propone el aprovechamiento de las carreteras ya construidas, así como la implementación de sistemas de transporte "más limpios, puesto que en ningún momento se ha percibido una saturación de tráfico que justifique una ampliación tan invasiva". En definitiva, la plataforma subraya la importancia de un desarrollo urbano sostenible, que contemple la conectividad de la comarca sin afectar su patrimonio natural y cultural.
Por ese motivo, Fayos asegura que los vecinos no se oponen al desarrollo de otras infraestructuras, como el Tren de la Costa, que mejoran la conexión entre los distintos pueblos de la región, pero insiste en que todas ellas "deben hacerse de manera respetuosa con el territorio". En ese sentido, Per L'Horta de la Safor solicita a la Generalitat que valore sus alternativas y proporcione toda la información pertinente "antes de que las obras avancen de forma irreversible".
Por su parte, desde la Conselleria de Medio Ambiente, Infraestructuras y Territorio, explican que, con esta infraestructura, se pretende encontrar un "equilibrio entre el desarrollo económico de la comarca y la sostenibilidad". Así, estas mismas fuentes, consultadas por Valencia Plaza, recuerdan que la ampliación de la CV-60 es una obra "muy demandada, tanto por los municipios como por el tejido empresarial de la Safor".
No obstante, el proyecto todavía se encuentra en una fase inicial, por lo que resulta "casi imposible" poner a disposición del público la documentación pertinente, ya que el informe todavía se está redactando. "Por supuesto, se están teniendo en cuenta todos los condicionantes ambientales y, si en algún momento de la obra, se percibe cualquier afección, la Conselleria actuará en consecuencia", señalan desde el departamento de Martínez Mus.
Estas mismas fuentes aseguran que "respetarán cualquier proceso judicial", aunque reafirman su apuesta por un proyecto "muy beneficioso y que puede compatibilizarse con el entorno ambiental de la comarca". En ese sentido, desde la Conselleria de Medio Ambiente recuerdan que la obra de ampliación de la CV-60 cuenta con la Declaración de Impacto Ambiental favorable; una resolución que se emitió durante la etapa del Botànic.