¿Existe el Wine Bar en València?
Vinos por copas, precios amables y a reír las penas. Apunta: Agustín Rico, Bodegas Albarizas y Tintorera
Vinos por copas, precios amables y a reír las penas. Apunta: Agustín Rico, Bodegas Albarizas y Tintorera
El Puerto tiene un color espacial, como los vinos que nos gustan, hedonistas varios, variados y variopintos. Y allá que nos vamos hoy, que unos gatos de cuatro patas han engalanado las fuentes para recibirnos entre cabras saltarinas, pajarillos juguetones y algunos istmos gruñones. Estamos de festival, estamos de disfrutez
Hoy miramos cara a cara a la vida, que cuando oscura parece alguien da al interruptor, se hace la luz y allí aparece. Mucho vino y una flor, la más preciosa, la que crece y crece
Nos ponemos de puntillas, abrigada y pizpireta, que hoy toca opereta. Volamos a la Belgique con Zinneke y con Mannenken a beber de todo un poco. Sin susto, con ganas y a lo loquiloco, que esta vez la cosa va de vinos (claro) y de cerveza (toma esa)
El equilibrio, esa es la clave
Días de rones, turrones y cuñados gorrones. Vamos abriendo una botellita de Champín mientras pensamos en el menú más espacial, que empieza nuestra particular San Silvestre
Desde hace 70 años, el tercer jueves de cada mes de noviembre se descorcha la primera botella de la campaña de este caldo joven y afrutado. València se sumó en 2010 a esta celebración mundial, que este año ha tenido lugar en el Trinquet Pelayo
No solo de oportos y madeiras vive y bebe el país luso
Creaciones excéntricas y radicales, cada una a su modo, de su padre y de su madre, como los humanos que las hacen
Vino y buena gente. Tan sencillo y tan auténtico. Cada año el Vintae Wine Fest reúne a un nutrido grupo de jóvenes que disfrutan de un fin de semana en torno a la cultura del vino en La Rioja
Lo que empezó como un osado experimento ha terminado por crear tendencia. La apuesta del enólogo Toni Arráez por el público joven ha logrado quebrar el monopolio de la cerveza en festivales de música como el FIB y el Mad Cool
Nuestro, muy nuestro. Su cuna es Castellón, pero en València le cantamos nanas. Lo que nos gusta el fuego a los valencianos...
Os lo tengo dicho y redicho, hedonistas vinosos, a Cádiz siempre se vuelve
Llegan vinos de luz y de guapitos. De nobleza y sencillez. De esos que montan y remontan porque saben que lo auténtico llega y se queda en ese corazón sureño que todos tenemos.
Hoy nos vestimos de blanco blanquito, como algunos de los que habitan sus tierras, esas que de blanca blanquita albariza llegan a deslumbrar
Toca volver de vacaciones, pero no pensamos deprimirnos ni una pizca pequeña, hedonistas. Que tenemos por delante una nueva temporada que prometemos bien disfrutona. Con mucho vino, que nunca falte. Así que rellenamos la maleta de botellas ricas y volamos. Cerramos los ojos y estamos en China, amiguis, que empieza la fiesta.
Pues sí, pues claro que vino. Que ya llegó el verano y su fruta. Calor caluroso, soles felices y playas desiertas. Porque así las imaginamos y así son. Con su chiringuito, claro. Ese en el que ponerse un poquito a la sombra, curar quemazones y lucir palmito. O esos bares de pueblo en los que refugiarse con amigos entre chata y chato, entre tapita y tapito. Que es lo que toca, hedonistas, refrescarse por fuera y por dentro de color gazpachoso asalmonado, que es clarete, no rosado.
Sobre el desconocimiento que del mundo del cocktail que se adivinaba en la ciudad