Àlex Martínez (Tardor): "En este disco no hay prejuicios, hemos hecho lo que hemos querido"

VALÈNCIA. El grupo valenciano Tardor presenta El Mal Pas, su cuarto disco y el primero producido íntegramente por ellos mismos. Estará disponible en plataformas digitales a partir del 15 de noviembre, aunque algunos privilegiados ya pueden disfrutar de este en formato físico.

Culturplaza se reúne con Àlex Martínez (compositor, voz y guitarra) y Cesc Domènech (batería) para conversar sobre este nuevo trabajo. Un disco muy personal que no se acoge a ninguna regla, que busca el balance entre la originalidad y el sonido propio sin caer en las estrategias de las grandes empresas. 

- Desde el barrio de Patraix hasta la playa de El Mal Pas de Benidorm, ¿a qué se debe este salto?
- Alejandro Martínez: Benidorm es mi “pueblo”. Aunque la gente lo vea como metrópolis internacional, la vivencia que yo lo he tenido allí es como la de cualquier persona con su pueblo de origen. El nombre del disco es en realidad un juego de palabras, probamos mucho con el concepto de la primera apariencia y lo que son las cosas en realidad, buscamos generar confusión. Tú lees El Mal Pas y piensas que es un error, mientras que lo que hace es referirse a una playa que guarda muy buenos recuerdos para mí.

- ¿Qué os supone este nuevo disco?
- Cesc Domènech: El disco tiene un componente muy fuerte de constancia y recuerdos. Con este cuarto proyecto nos encontrábamos un poco desencantados con todo lo que habíamos vivido a lo largo de estos 10 años, queríamos dar un paso diferente, que puede que salga mal o no.

- A.M: De hecho, la portada del disco cambia su significado según cómo la mires. Puede suponer tanto un empuje hacia arriba como un salto al vacío. Representa el hecho de autproducir un disco, una locura que puede ser un “mal paso” o un acierto. 

- Primer disco auto producido de manera completamente independiente, ¿cuales han sido vuestras impresiones?
- C.D: En este disco todo lo que gira en torno a Tardor depende estrictamente de nuestro grupo. Nos hemos encargado de todo: management, comunicación (con ayuda de Ana Gitrama) y gestión de estrategia.

- A.M: Está todo autogestionado, no hay ninguna empresa de por medio ni ningún tipo de intermediario.

- En este “salto” a la libertad absoluta intuyo que también habéis tenido que poner unos límites…
- A.M: Siempre hay límites, tanto económicos como creativos. Como dijo Orson Welles: “El enemigo del arte es la ausencia de limitaciones”, si tú tienes libertad absoluta para crear hay que poner ciertas barreras para que se entienda el mensaje. Yo antes de componer pienso en lo que quiero hacer, empiezo a ponerle ingredientes y luego lo cocino. Pensamos mucho antes de hacer, y eso se nota. Lo que no ha habido en este disco es ningún tipo de prejuicios, hemos hecho lo que hemos querido. No hemos tenido miedo a probar, hemos huido de la estrategia a la hora de componer, queríamos hacer algo fresco y que sonara más a antiguo que a mainstream. 

- ¿Diríais que es vuestro disco más innovador?
- C.D: Yo creo que más que innovador es arriesgado. Hemos introducido parámetros que tal vez trabajando con un productor externo nos habría dicho: “parad, que no es así como suenan las bandas”.

- ¿A qué se debe este “riesgo”?
- A.M: El grupo acabó un poco desencantado en nuestra anterior etapa. En vez de canalizar ese desencanto en inseguridad o dudas lo utilizamos para reforzarnos a nosotros mismos y decir: “vamos a hacer lo que nos dé la gana”. Este descontento con la industria musical lo hemos utilizado en todo caso con un poco de rabia, este disco es un poco más descarado... para lo que somos nosotros. 

- ¿Qué ofrecéis a vuestros fans?
- C.D: Este disco nace sin prejuicios ni expectativas. Nos sentíamos fuertes de tener una base social segura y activa, y sabíamos que para nuestros fans iba a funcionar bien. 

- A.M: Por ejemplo, la misma noche que cerramos la gira de Patraix anunciamos el lanzamiento de este disco y vendimos más copias que en nuestra vida. Hemos conseguido un público muy fiel y activo, lo que permite a un grupo como nosotros sobrevivir en este ámbito. Sabemos que es nuestra fórmula para seguir, nosotros tenemos una música fácil de escuchar, que al 80% de gente al que se la pongas dirá: “ah, pues suena bien”. 

- Tenéis “música fácil” pero temas fuertes, en este disco por ejemplo os atrevéis con temas como el de la muerte, que suele ser bastante tabú. 
- A.M: Nosotros somos un grupo fácil a nivel sonoro, pero a nivel narrativo no somos nada básicos. Uno de nuestros puntos fuertes es que a nivel de letras no decimos banalidades. Son letras que nacen fruto de la reflexión y con una intención clara. ¿Por qué no se puede hacer algo didáctico sobre temas como la muerte? Nos gusta que las letras digan cosas, no nos apoyamos tanto en los recursos estéticos por ejemplo. Las letras del indie al final por intentar ser especiales son como: “dime que estás intentando decir porque no entiendo nada”. 

- C.D: Pretendemos que una persona pueda entender el concepto desde la primera escucha. Si tienes claro lo que quieres decir y como es algo que sale rápido. Encontrar el equilibrio entre ser concreto y ser original es algo complicado. 

- A.M: Utilizamos mucho es costumbrismo para explicar las cosas. Siempre tenemos una intención compleja, aunque en mensaje parezca simple. Creo que eso es lo que nos diferencia de otros grupos de Pop, que dicen mensajes más simples a todos los niveles.

- Y citando uno de vuestros temas… ¿Con que grupos pertenecientes a la música valenciana haríais una Coalició?
- C.D: Hacer una coalición con gente de calidad para dar ese componente fuerza siempre es un aspecto interesante. Sobre todo en el pop-rock en València, donde nos encontramos en una plaza en la que es difícil rodar. Es complicado abrirse camino con tantas propuestas, muchos grupos con ideas muy buenas se quedan al margen. 

- A.M: Nosotros siempre buscamos esa retroalimentación con grupos que nos gustan y con los que compartimos ideales. Nos tenemos que apoyar unos a otros en esta ciudad tan pequeña. Aquí está todo controlado por muy poca gente y tenemos que generar una “resistencia” entre nosotros. 

- ¿Veis que falta colaboración entre grupos?
- A.M: Muchas veces sí, y hemos tenido grandes decepciones con grupos amigos incluso. A veces te niegas a aceptar un concierto por no someternos a unas cláusulas abusivas y luego llega otro grupo y las acepta; y piensas… ¿acaso no ha servido de nada mi desplante?.

- Y hay principios que a veces tienen un precio…
- A.M: Si yo estoy negándome porque creo que están abusando de mi grupo y de la música en general no puede ir otro luego y decir que sí. Hay que tener en cuenta las condiciones de cada grupo, es una situación que no es nada fácil. Los que controlan el cotarro saben cómo jugar con eso y siempre hay alguien dispuesto a ser explotado, es la ventaja del explotador.