El Consell desatasca las obras de Bauhaus y acaba con la parálisis en Alfafar Parc

VALENCIA. Vía libre para el desarrollo comercial alrededor de Ikea en Alfafar Parc. El Consell, como ya hizo a finales de año con las obras de Decathlon, ha desatascado el proyecto de Bauhaus, que llevaba meses a la espera del preceptivo informe de impacto ambiental para iniciar las obras de la que será su segunda tienda en la Comunitat.

La solución para el problema, sin embargo, ha sido diferente en esta ocasión. La firma alemana, especializada en productos para el hogar, el taller y el jardín, se ha beneficiado de un cambio legislativo que ha entrado en vigor en 2016.

Según trasladan a Valencia Plaza fuentes de la Conselleria de Agricultura, Medio Ambiente, Cambio Climático y Desarrollo Rural, la nueva Ley de Medidas Fiscales permite que los informes de impacto ambiental -en determinados supuestos- los otorgue la administración local. Así ocurre en este caso, dado que Bauhaus precisa de una "evaluación pormenorizada" dentro de un complejo que ya está calificado como urbano.

Fuentes municipales añaden al respecto que la hoja de ruta pasa por que el Ayuntamiento desista de la petición de evaluación ambiental que realizó a la conselleria para que la realicen los propios técnicos de la administración local. En tal caso, los trámites no se prolongarán más de un mes y medio.

Tomada esta decisión, en el siguiente pleno municipal se podrían aprobar las obras. Para agilizar todavía más este proceso, tal y como ya ha hecho Decathlon, Bauhaus solicitaría primero permiso para remover las tierras de su parcela, con el fin de adelantar los trabajos y poder empezar a construir en el momento en el que cuenten con la autorización para levantar la tienda. En función de estos cálculos, ambas firmas podrían iniciar su actividad en el plazo de un año, a principios de 2017.

La nueva comisión de Evaluación Ambiental de la conselleria de Agricultura y Medio Ambiente inició su andadura a finales del pasado mes de diciembre. En la sesión constitutiva se lograron "desencallar" un total de 50 proyectos, según explicó entonces el secretario autonómico de Medio Ambiente, Julià Álvaro.

La comisión, cuyo retraso en su puesta en marcha tuvo su origen en el tira y afloja por las competencias entre las consellerias de Vivienda (PSPV) y Agricultura (Compromís), aprobó aquel día el proyecto de Decathlon, que había solicitado el perceptivo informe el 18 de agosto del año pasado.