Mercadona instalará mamparas en las cajas de pago y obligará a los clientes a llevar guantes

VALÈNCIA. La cadena de supermercados Mercadona refuerza aún más las medidas de seguridad y salud en sus establecimientos para evitar contagios por coronavirus. De esta manera, la compañía de Jun Roig instalará progresivamente, a partir del próximo lunes 23 de marzo, mamparas de metacrilato de protección y separación en la sección de cajas de todos los supermercados.

Asimismo, impone la obligatoriedad del uso de guantes por parte de los clientes en todos sus establecimientos, iguales que los que se utilizan en la sección de fruta y verdura, y que se dispensarán en los accesos, según informa en un comunicado. Se trata de una medida que se suma a otras ya adoptadas como han sido la instalación en cada supermercado de gel desinfectante y papel para que los clientes puedan proceder a la limpieza del mango del carro, reforzando su higiene.

Mercadona ya redujo hace unos días el horario de apertura, que es de 9 a 19 horas, aunque se irá adaptando según las circunstancias. Además, ya adoptó la decisión de dar preferencia en la compra a mayores, personas con discapacidad, con movilidad reducida, embarazadas y los acompañantes necesarios. 

La compañía también mantiene las recomendaciones ya vigentes como son acudir solamente una persona a realizar la compra (no en familia, o con niños o grupos); no realizar la compra de personas que formen parte de los grupos de riesgo y espaciar la compra a lo largo del día y no a la hora de apertura del establecimiento.

También recomienda no almacenar innecesariamente productos: "el suministro de productos de primera necesidad está más que garantizado", recalca, y pagar preferentemente con tarjeta y evitar el uso de dinero en efectivo. Además, y con el objetivo de proteger la seguridad alimentaria, no se admitir en ningún caso y bajo ningún concepto devoluciones de producto.

Mercadona ya ha establecido un aforo máximo permitido, cumpliendo con la normativa de forma que no se permite el acceso una vez completo dicho aforo, mientras no abandonen el establecimiento otros clientes. En la vía pública de acceso a cada supermercado esta marcada una distancia mínima de un metro para las personas que esperan su turno de entrada.

En el interior del local se garantiza la separación mínima de un metro entre clientes con recomendaciones del personal del establecimiento, con el apoyo de carteles reforzando estas medidas, y también están marcados los límites de 1 metro en el suelo de la sección de Pescadería y las líneas de cajas.