VALÈNCIA. La comida para llevar se ha convertido en un servicio recurrente en el día a día de muchas personas, pero no todo vale en los tiempos en los que todo camina hacia lo sostenible y la proximidad. Para cubrir este nicho, el grupo Novaterra ha puesto en marcha The Food Point, una franquicia de comida preparada sostenible para millenials con la que buscan facilitar el emprendimiento de personas en riesgo de exclusión social.
El grupo Novaterra, dirigido por Christian Mecca, pone en marcha empresas sociales que buscan obtener impactos sociales y medio ambientales positivos, además de viabilidad económica. A día de hoy, el conglomerado cuenta con empresas de comedores escolares, catering de eventos, logística de última milla sostenible y gestión integral de centros a la que ahora sumaran esta franquicia de puntos de venta de comida "saludable, sostenible y sabrosa".
Un grupo que, junto a la Fundación Novaterra, da empleo a 150 personas y busca facilitar que, personas alejadas del mercado laboral, puedan recomponer sus vidas a través de un empleo. "La empresa es una herramienta al servicio de un propósito. La cuenta de resultados tiene que salir, pero no por encima de las personas ni por encima del planeta", asegura Mecca.
Desde Novaterra detectaron una necesidad en medio de la transformación de la hostelería, acelerada por la pandemia y a las necesidades de los millennials. "Necesitaban el triple impacto y las cuatro 's': sostenible, social, sabroso y saludable", señala Stefani Juárez, directora adjunta. "No es un restaurante, no es una casa de comida, no es una empresa de tuppers a domicilio. Se trata de un punto de distribución de comida que recoge lo mejor de todo ésto", señala Mecca.
La intención es poner en marcha un negocio de comida que entre por los sentidos, tanto a nivel de gusto como de vista con el fin de que puedan satisfacer los caprichos de Instagram de los millennials. Sin embargo, señalan la importancia de la sostenibilidad y la trazabilidad del producto. "No es lo mismo que un producto recorra miles de kilómetros o que sea de la huerta del Camp del Túria. No da igual que esté lleno de química a que no lo esté. Que tenga bienestar animal o no", recalca Mecca. "Cuando tú hablas de comida también hablas de valores".
La carta inicial estará compuesta por media docena de entrantes con productos innovadores como gofres de patata a los que se sumarán, como planto principal, bowls con distintas bases a las que se podrá añadir proteína animal o vegetal. "El 70% de nuestra carta está orientada a productos vegetarianos o veganos, motivo por el que la proteína la hemos querido dejar a parte para que se elija junto al topping", apunta Juárez. A esta oferta sumarán algunos postres para, a partir de ahí, ir sumando nuevas propuestas elaboradas por su chef, Pau Vaño.
Estos bowls rondarán entre los 6 y 8 euros. "Será un plato fuerte, único, compuesto por todo el aporte nutricional. La gente ya no busca menú, sino platos bien equilibrados", apunta Suárez, quien señala que la intención es incluir una novedad mensual. "Queremos que sea una carta viva". El punto de venta está orientado al delivery y take away, y se podrá pedir directamente en el local o por las plataformas más conocidas de envío a domicilio.
"Queremos acompañar el proceso de cambio de las personas", señala el CEO de Novaterra. "La comida de aquí a 15 o 20 años será vegetariana y vegana y las tendencias van por ahí". El espacio abrirá de lunes a domingo en horario de comida y cenas con el fin de satisfacer las necesidades de aquellos que llegan a casa y no tienen tiempo de cocinar.
Además, les gustaría en un futuro incluir tecnología blockchain para que el usuario pueda tener acceso a todas las certificaciones que acrediten el recorrido de los alimentos que componen cada plato. "Novaterra se ha ganado en la Comunitat Valenciana su reputación social y pueden venir a ver nuestra nevera, pero sabemos que la evolución va a ser el poder contar la historia digitalmente", asegura Mecca.
Aunque venderán por los canales de las principales plataformas de delivery, The Food Point utilizará para su distribución los servicios de Novaterra Logistics, una empresa de mensajería que emplea a personas con discapacidad y desde la que hacen repartos con vehículos no contaminantes. "Todo el reparto se hará desde esta empresa porque queremos generar puestos de trabajo para personas con discapacidad, pero además creemos que un reparto del siglo XXI debe ser sostenible, medio ambientalmente hablando", señala Mecca.
"Hemos unido la cocina central para controlar y tener eficiencia en coste, la empresa de logística y la necesidad de generar autoempleo, además de la necesidad clara del consumidor", asegura. A día de hoy, desde la cocina central prestan servicio a centros escolares, centros sociales, además del programa 'Menjar a casa' del Ayuntamiento de València. También tienen un servicio de catering que se ha visto frenado con la pandemia.
Este concepto está pensado para locales pequeños, de 50 a 70 metros cuadrados a la que los platos llegarán prácticamente confeccionados, ya que todas las elaboraciones principales serán realizadas en su cocina central, ubicada en La Coma. Esto permitirá que en los puntos de venta solo sea necesario 'ensamblar' los platos.
La baja inversión necesaria hace que la fórmula esté enfocada como franquicia social. "Hemos detectado que hay muchas personas con capacidad de generar un autoempleo y que están en dificultad económica", reconoce Juárez. "Si les damos un modelo de negocio testado con una inversión muy ajustada podrían poner en marcha sus negocios".
Además, la realización de las elaboraciones desde la comida central permite, al margen de optimizar el coste, no necesitar mano de obra muy cualificada y solo sería necesario un perfil de ayudante de cocina, para lo que darán cursos de formación. "La Fundación Novaterra tiene un programa, Dóna Emprén, que creamos con Caixa Popular después de la visita de Mohamed Yunnus", señala Juárez. "Con él estamos acompañando a mujeres a las que damos microcréditos para que puedan poner en marcha negocios de autoempleo".
Sin embargo, reconocen que a pesar del proceso de acompañamiento con mentores no todas las personas tienen una idea de negocio. "Si les diéramos un formato de proyecto estas personas podría autogestionarse y crear dos o tres puestos de trabajo para su familia", destaca.
Desde Novaterra abrirán el primer punto propio en junio, concretamente en el barrio de Monteolivete por su cercanía a múltiples zonas, Sin embargo, ya miran a 2022 con la idea de cerrar el año con cinco puntos de venta en la Comunitat Valenciana. "Creemos que tenemos dos ventajas fuertes, y es que lo que hacemos porque nos lo creemos y cuando hablamos de sostenibilidad es que en casa somos consumidores ecológicos", asegura Mecca. "Cuando decimos que los huevos son camperos o la pasta es ecológica es lo mismo para todos, desde el catering de una boda al menú de los colegios", insiste.