VALÈNCIA. "Estamos buscando jóvenes financieros para formarlos y que crezcan con los valores y la cultura de la compañía". Son palabras de José Manuel García, socio-director de ATL Capital en la Comunitat Valenciana, a este diario. "Nuestro objetivo es seguir creciendo como lo venimos haciendo desde que nos implantamos aquí en 2006 y para crecer hay que invertir en recursos y personas".
Actualmente la plantilla de ATL Capital en la 'city' valenciana está compuesta por cinco personas más pero "tenemos previsto incorporar una más en las próximas semanas y otra a partir de otoño. Si todo va bien, como esperamos, a lo largo de los dos próximos años duplicaremos la plantilla, lo que significa que el negocio se habrá incrementando notablemente".
La decisión de ATL Capital en València responde a la estrategia que está siguiendo esta boutique financiera en España de reforzar los equipos de asesores financieros con el objetivo de crecer en patrimonio y en número de clientes, tal y como están haciendo en Madrid y Zaragoza, las otras dos ciudades donde tiene oficina propia. Un movimiento que llega en plena efervescencia en este sector bancario donde, tal y como ya advirtió, José Manuel García en la Revista Plaza hace un año "el cliente de banca privada es cada vez más exigente".
Actualmente ATL Capital gestiona en toda España en torno a los 1.400 millones de euros, una cifra que se ha marcado duplicar en los próximos cinco años. Por su parte, el número de clientes asciende a 2.200 y el objetivo de aquí a 2.023 es de alcanzar los 4.000, según la hoja de ruta de la compañía. En cuenta al número de empleados del cerca de la centena actual quiere pasar a los 200.
Fundada en 2003 por Jorge Sanz, consejero delegado de la firma, ATL Capital Gestión de Patrimonios es una entidad de Banca Privada que basa su modelo de negocio en ofrecer un asesoramiento financiero global.
ATL Capital está integrada por profesionales con elevada formación y demostrada experiencia en el sector financiero. El capital de la firma se distribuye entre sus socios, un aspecto que refuerza el carácter libre en las recomendaciones de inversión a los clientes, al no existir ningún conflicto de interés.