MADRID (EFE). CGT, el sindicato convocante de dos jornadas de huelga en Renfe esta semana, los días 7 y 11 de noviembre, baraja llevar a cabo más movilizaciones, tras la negativa de la empresa a recoger ninguna de sus reivindicaciones en el preacuerdo de convenio firmado con las organizaciones mayoritarias (CCOO, UGT y Semaf).
La semana que viene se celebra un pleno con el resto de secciones sindicales y es cuando CGT valorará si lleva a cabo más huelgas, ha señalado este jueves, en una rueda de prensa, la secretaria general de SSF-CGT, Noelia Martín.
Marín ha añadido que, probablemente, CGT convocaría otra huelga para el próximo 2 de diciembre, pero todavía no lo tiene cerrado, ya que el sindicato funciona de manera asamblearia y es la afiliación la que tiene que acordar estas movilizaciones.
"En principio, vamos a ir valorando poco a poco si se puede negociar y llegar a un entendimiento, porque tampoco queremos convocar muchas huelgas", ha matizado.
CGT considera que Renfe y las organizaciones sindicales mayoritarias han negociado un convenio colectivo de espaldas al comité de empresa y a los trabajadores que, además, es insuficiente para mejorar las condiciones laborales de los ferroviarios.
Tras el primer día de huelga, con un seguimiento del 87 % del personal que no tenía obligación de realizar ningún servicio mínimo, según CGT, y de entre un 2 % y un 3 %, de acuerdo con Renfe, ambas partes se han reunido hoy, en vísperas de la segunda jornada de protesta.
En este encuentro, Renfe ha instado a CGT a firmar el nuevo convenio pactado con los sindicatos mayoritarios y a negociar sus reclamaciones dentro del mismo y en las mesas de trabajo, ha detallado Martín.
CGT reivindica una subida salarial vinculada al IPC real, que evite la pérdida de poder adquisitivo, así como la eliminación de las dobles escalas salariales (que producen diferencias de hasta el 25 %) o el aumento del número de ingresos de personal que permita internalizar cargas de trabajo.
A su juicio, el incremento de personal puede revertirse en el mejor funcionamiento del ferrocarril, ayudar a recuperar las circulaciones que había antes de la pandemia, frenar el deterioro del servicio y ofrecer a los usuarios precios asequibles y mejores horarios y frecuencias, ahora que se ha establecido el abono gratuito.
En su opinión, más maquinistas hacen que no se tengan que suprimir trenes; más personal en taquilla hace que la gente puede estar más y, en intervención, ayuda en la seguridad en la circulación.
En este sentido, ha recordado que ya se vio con el incidente del tren en el incendio de Bejís (Castellón), cuando un convoy que une Valencia con Zaragoza quedó atrapado por el humo y las llamas de este municipio, lo que ocurre por no llevar a un interventor.