VALÈNCIA. Según datos hechos públicos desde el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, las primeras semanas de confinamiento arrojaron unas cifras alarmantes en el consumo de alcohol. Las compras de cerveza en supermercados aumentaron un 86,5% en la semana del 6 al 12 de abril, las de vino un 73,4% y las de licores fuertes un 93,4% respecto a la misma semana de 2019.
Ante el riesgo de tener que volver a cierto grado de confinamiento, especialistas en adicciones y salud mental advierten del “cóctel molotov” que supone la suma de soledad y consumo de alcohol.
“La situación a la que nos enfrentamos cuenta con los elementos para la tormenta perfecta: aislamiento social, miedo y ansiedad ante la incertidumbre, sobreinformación y excesivo tiempo libre”, asegura el Dr. Miguel Ángel Harto psiquiatra de la Unidad de Desintoxicación y Patología Dual de Vithas Aguas Vivas y de IVANE Salud. En este sentido, recalca, “la soledad y el consumo de alcohol también pueden aumentar la presenivancia de trastornos depresivos con el consecuente aumento del riesgo de suicidio, por lo que es muy importante reducir el consumo de alcohol.
Desde esta unidad Vithas se advierte que, ante esta situación, el alcohol se puede presentar como una opción para sobrellevar el estrés. “Pero en realidad no es un buen mecanismo de afrontamiento”, asegura Alberto Manero, psicólogo de la Unidad de Desintoxicación y Patología Dual de Vithas Aguas Vivas y de IVANE Salud, “ya que se sabe que aumenta los síntomas de los trastornos de pánico y ansiedad, de la depresión y otros trastornos mentales, que, por añadidura, afectan no solo a quien consume, también a su familia”.
Desde Vithas Aguas Vivas se trasladan consejos básicos para evitar el consumo de alcohol ante un posible escenario de confinamiento:
Intente hacer ejercicio en interiores. La actividad física fortalece el sistema inmunitario; en general, tanto a corto como a largo plazo, es una forma muy beneficiosa de pasar un período de cuarentena.
Trate de comunicarse con familiares y / o amigos que lo apoyen. En caso de resultar insuficiente, busque apoyo de servicios locales; existen líneas telefónicas de apoyo ante situaciones de riesgo con respecto al alcoholismo
Crear un sistema de autosuficiencia con alguien de confianza y buscar ayuda adicional es necesario. Es importante practicar el distanciamiento físico, pero no el aislamiento social: llamar, enviar mensajes de texto y / o escribir a los más allegados puede reducir esta barrera social.
Evitar las señales de alcohol y los desencadenantes en TV y medios de comunicación donde hay una comercialización y promoción generalizada del alcohol; es importante tener cuidado evitando enlaces a las redes sociales patrocinados por la industria del alcohol.
Tratar de mantener su rutina diaria tanto como pueda, concentrarse en las cosas que puede controlar y tratar de mantenerse conectado, por ejemplo, a través de un entrenamiento diario, pasatiempos o técnicas de relajación.
Desde la Unidad de Desintoxicación y Patología Dual de Vithas Aguas Vivas y de IVANE Salud se advierte, asimismo, que la situación actual también puede suponer, en cierta forma, una ayuda para alejarse del consumo del alcohol en tanto en cuanto los eventos sociales disminuyen.
"La situación actual puede suponer una oportunidad única para dejar de beber, o al menos reducir considerablemente el consumo de alcohol, ya que distintas situaciones de presión de grupo, como fiestas, reuniones de amigos, restaurantes y clubes, son (por necesidad) evitables”, explica Alberto Manero.
Por otra parte, las intervenciones telemáticas para los trastornos por consumo de alcohol por parte de profesionales y grupos de ayuda mutua pueden ser menos estigmatizantes, ya que ofrecen un mayor anonimato y privacidad. En este sentido, recuerda el Dr. Haro, “es conveniente consultar qué ayuda puede obtener por los medios tecnológicos.
El gran inconveniente de la enfermedad renal crónica es su perfil asintomático en fases iniciales, por lo que 9 de cada 10 personas que pueden padecer ERC no lo saben