La dirección del Luis Vives rechaza la propuesta de las familias como solución a la semipresencialidad

VALÈNCIA.  La dirección del IES Luis Vives rechazó este martes la alternativa ET (Entre Totes) de las familias del alumnado de 2º de Bachillerato que proponía alternativas para garantizar la plena docencia del curso. Un rechazo que deriva de la decisión del centro de reducir el número de estudiantes que acuden de manera diaria a las aulas para garantizar la seguridad, pero que no soluciona la falta de docencia que presentan los jóvenes para afrontar las pruebas EBAU, según explica un padre de la clase a Valencia Plaza.

A principios de mes, los seis grupos de alumnos y alumnas del curso diurno comenzaron las protestas en forma de huelgas frente al centro a causa de la falta de clases de manera diaria, debido a que acuden de forma alterna sin contar con docencia cuando se quedan en casa. Esta misma exigencia se trasladó la semana pasada a los de primero de Bachillerato bajo el mismo pretexto de desigualdad al impartir menos temario que el resto de IES valencianos.

Ante esto, el pasado jueves la dirección del centro decidió estudiar como posible solución la alternativa ET presentada por las familias y que pretende reorganizar las aulas de forma "sencilla e inmediata" para alcanzar la plena docencia del estudiantado. En el documento de treinta páginas se presenta una ficha del estado actual de las asignaturas y los horarios junto a otra ficha con propuestas que juntan a todos los alumnos en "las aulas amplias con las que cuenta el centro". No obstante, la respuesta de este martes por parte del equipo directivo fue no adaptar ninguna de ellas para continuar con el modelo de semipresencialidad.

Según comenta el padre en función a la explicación dada en la reunión, el centro tomó esta decisión de partida porque con la mitad del alumnado se reducen los contagios y el riesgo. "Este argumento es el único al que le vemos sentido en varias semanas, ya que el resto de explicaciones como que no cabían los alumnos, que no se podían habilitar espacios o que los forjados no podían soportar el peso de grupos más grandes eran mentira. Nunca habían intentado lograr la máxima presencialidad posible del alumnado", afirma el hombre.

Esta contrariedad de objetivos entre los padres y la dirección del Luis Vives origina que las familias se sientan "engañadas" y "decepcionadas", puesto que habían confiado en la dirección del centro "ofreciendo la ayuda y las ideas para resolver el problema". Además, padres y madres que habían cambiado a sus hijos o hijas de centro para mejorar su educación ahora están viendo como se está perdiendo parte del curso, mientras que en su antiguo IES sí que se imparte una docencia completa.

"La dirección del instituto al contrario que otros centros ha decidido sacrificar una o dos promociones de estudiantes de Bachillerato a su capricho de anteponer unas arbitrarias decisiones de supuesta seguridad a los derechos de un alumnado al que han fallado como depositarios de una confianza", expresa el hombre a este diario. 

Las familias optan por la vía legal

Frente a la falta de soluciones por la decisión tomada, las familias continúan movilizadas y trabajando para resolver una desigualdad que, según ellas, proviene de la dirección y no de la crisis sanitaria. Es por ello que han comenzado a trabajar el tema por la vía legal a través de abogados que les han comentado que puede haber materia jurídica en la situación, tal y como explican a este periódico.

Otros institutos, por el contrario, ya han resuelto el problema de la docencia sin necesidad de recurrir a la Conselleria o la Inspección como el Luis Vives, según exponen las familias de 2º de Bachillerato. De esta modo, llevarán el asunto este miércoles al AMPA y este jueves al Consell Escolar con el objetivo de "arreglar esta desigualdad" que afecta a sus hijos e hijas.