MADRID (EP). La economía española desaceleró su crecimiento trimestral casi dos puntos entre julio y septiembre, hasta situarlo en el 0,1%, frente al 2% del trimestre anterior, debido, sobre todo, al frenazo de la inversión y a la moderación del consumo de los hogares, según la Contabilidad Nacional publicada este viernes por el Instituto Nacional de Estadística (INE). Este crecimiento del 0,1% es una décima inferior al avanzado el pasado 28 de octubre, cuando el INE estimó un avance trimestral del PIB del 0,2%.
Estadística también ha revisado los datos del primer y segundo trimestre del año, en este caso al alza. La economía española creció entre abril y junio un 2%, medio punto más de lo que se publicó en su día. De esta forma, el ritmo de crecimiento del PIB se desaceleró 1,9 puntos entre el tercero y el segundo trimestre del año. En el caso de la revisión del primer trimestre, se ha pasado de una tasa negativa del -0,2% a un crecimiento del PIB entre enero y marzo del 0,1%.
Las revisiones del organismo también han afectado a las tasas interanuales. En el tercer trimestre, el crecimiento interanual de la economía española que se avanzó el pasado 28 de octubre, del 3,8%, se eleva ahora seis décimas, hasta el 4,4%. Esta tasa, sin embargo, contrasta con el crecimiento del 7,6% del segundo trimestre del año, que se ha revisado al alza en ocho décimas. Estadística también ha elevado la tasa interanual del primer trimestre del año desde el 6,7% al 7%.
Estadística explica que en el avance de datos del tercer trimestre publicado a finales de octubre la mayoría de los indicadores estadísticos sobre la evolución económica reciente ofrecían resultados hasta agosto. No obstante, los resultados que se publican este viernes ya incorporan todos los indicadores estadísticos que marcan la evolución económica del tercer trimestre, "cuya información abarca ya, en la inmensa mayoría de los casos, el conjunto del mismo", precisa.
La desaceleración del crecimiento interanual del PIB desde el 7,6% del segundo trimestre al 4,4% del tercero se debe a la menor aportación tanto del sector exterior como de la demanda nacional. En concreto, la demanda externa aportó 1,5 puntos al PIB interanual del tercer trimestre, cifra 1,5 puntos inferior a la del trimestre anterior, mientras que la demanda nacional aportó nueve décimas, 1,6 puntos menos que en el trimestre anterior y su menor contribución desde el segundo trimestre de 2019. A precios corrientes, el PIB del tercer trimestre se situó en 332.044 millones de euros, el más elevado de la serie histórica y un 8,7% superior al de un año antes. No obstante, esta tasa es 3,2 puntos inferior a la del segundo trimestre.
El crecimiento trimestral del 0,1% registrado en el tercer trimestre se debe, entre otros factores, a la desaceleración del consumo de los hogares, que sólo aumentó un 0,1% entre julio y septiembre, lo que supone 1,6 puntos menos que en el trimestre anterior. Este frenazo en el gasto de las familias coincide en el tiempo con inflaciones de dos dígitos. En julio, el IPC marcó un máximo del 10,8%, tasa inédita en casi 40 años.
Por su parte, el consumo de las instituciones sin fines de lucro avanzó un 0,9% en el tercer trimestre, frente al crecimiento del 0,5% del trimestre anterior, mientras que el gasto público, se disparó un 1,4% entre julio y septiembre, volviendo a tasas positivas tras tres trimestres consecutivos de descensos.
La inversión, por su parte, bajó un 0,1% en el tercer trimestre, frente al avance del 2,9% del trimestre anterior, registrando su primera tasa negativa tras dos trimestres en positivo. Ello se explica por la caída en un 0,6% de la inversión en vivienda, en contraste con el ascenso del 7,6% del segundo trimestre. En lo que concierne al sector exterior, las exportaciones desaceleraron su avance trimestral hasta el 1,5%, frente al 5,4% previo, mientras que las importaciones crecieron un 3%, lo mismo que en el trimestre anterior.
El crecimiento interanual de la economía española se desaceleró 3,2 puntos en el tercer trimestre, desde el 7,6% hasta el 4,4%, debido al menor consumo, ya que la inversión aceleró su crecimiento interanual siete décimas, hasta el 5,9%. En concreto, el consumo de los hogares moderó su crecimiento interanual dos puntos en el tercer trimestre, hasta el 1,4%, mientras que el gasto público siguió en negativo por cuarto trimestre consecutivo al mostrar un retroceso interanual del 2%, frente al -2,9% del trimestre anterior.
Por sectores económicos, la construcción lideró el crecimiento interanual, con un aumento de su valor añadido bruto del 5,6%, seguido de los servicios, con un alza del 5%, y de la industria (+3,3%). En cambio, la agricultura registró un descenso del 3%. El empleo, medido en términos de Contabilidad Nacional, creció un 2,9% interanual en el tercer trimestre, 2,3 puntos menos que en el trimestre anterior, lo que supone un aumento de 540.000 puestos de trabajo equivalentes a tiempo completo en un año. En términos interanuales, las horas efectivamente trabajadas subieron un 3,3% en el tercer trimestre, tasa similar a la del trimestre anterior.