VALÈNCIA. Cuestión de abrazar e impulsar los Objetivos de Desarrollo Sostenible. Los 17 ODS fueron marco de fundamento del XXVII Seminario de Ética Empresarial y Economía de la Fundación Étnor, que sirvió como lanzadera de cinco propuestas económicas, buscando implicar a empresas e instituciones en los ODS como actores principales para erradicar la pobreza y reducir las desigualdades. Los conceptos clave están en la justicia y la ética, pero también en esos objetivos como oportunidades de negocio.
El presidente de la Fundación Étnor, Enrique Belenguer, repasó este jueves esas cinco líneas económicas que proponen a los agentes sociales.
Reducir las desigualdades como forma de erradicar la pobreza y de lograr el crecimiento es la primera de estas propuestas. Es uno de los mayores retos que existen el de trabajar en el recorte de las desigualdades. Otro de los fundamentos propuestos reflexiona por unir el poder de la economía a los ideales universales en un mundo globalizado.
La tercera línea sería la de asumir la Responsabilidad Social Empresarial (RSE) como una cuestión de prudencia y justicia; y en esto se pone en valor la necesidad de sostenerse desde la eficiencia. El cuarto punto desarrollado en el seminario fue promover el pluralismo de los modelos de empresa. Y el quinto, una reflexión respecto a que economía y empresa deberían cultivar distintas motivaciones de la racionalidad económica.
Belenguer concretó respecto a las herramientas con las que se pretende dotar a la empresa para caminar hacia la ejecución de los ODS que las que mayor incidencia tienen son "las relativas al medio ambiente y aquellas que tienen una afectación directa en las personas", al tiempo que enfatizó el marco de la igualdad de género. "Los ODS comprometen mucho más al mundo de la empresa y en este seminario se trata de acercar herramientas para lograr esos objetivos". La Fundación Étnor lleva 27 años trabajando ya en esta línea.
"El objetivo de la Fundación desde su origen es crear un espacio de análisis sobre la ética. Este año nos hemos centrado en el ámbito empresarial como generadores de oportunidades y responsables de transformar la desigualdad", explicó su presidente, al tiempo que concretó que "la finalidad de este seminario es despertar esta necesaria implicación ética en todos los sectores empresariales justos y en todo tipo de empresa de cualquier tamaño. A lo largo de las sesiones se han tratado temas como el sector agroalimentario, el medio ambiente, las finanzas, el compromiso de las entidades bancarias o las amenazas de malas prácticas empresariales".
Lo conceptual se elevó a una explicación pragmática durante el seminario con casos como los de Bankia o Leroy Merlin. Belenguer ha subrayado que espera que el movimiento empresarial respecto a los ODS "no sea sólo un brote, sino que se mantenga".
Emilio Lamo de Espinosa, presidente del Real Instituto Elcano, think-thank de estudios internacionales y estratégicos para el fomento en la sociedad del conocimiento de la realidad internacional y las relaciones exteriores de España, clausura el seminario este jueves.
Belenguer hizo estas reflexiones en un almuerzo con los medios de comunicación, en el que también estuvo presente la directora de la Fundación Ética de los Negocios y las Organizaciones (Étnor) y catedrática de Ética de la Universitat de València, Adela Cortina. Y sobre la mesa fue imposible que no apareciese el caso del Aquarius.
Cortina reflexionó al respecto del movimiento de solidaridad suscitado por la situación no sólo de los 629 migrantes que llegarán a València a bordo del Aquarius, del Orione y del Dattilo: "Esto debe ser una llamada de atención respecto de una situación inadmisible".
"Estamos bajo mínimos de moralidad y de justicia", ha asegurado la catedrática de Ética de la UV en referencia no sólo al caso del Aquarius, sino también a las noticias diarias de personas que mueren ahogadas en el Mediterráneo.
Cortina ha expresado que "hay que organizar cómo hacerlo y para ello están las instituciones. Pero además hay que hacerlo caso por caso, de forma individual, porque son personas. Habrá que ir preparándose para institucionalizar estas situaciones. Y no es una cuestión de València o de España, sino de la Unión Europea".