El empresario obtiene el apoyo de los trabajadores tras ofrecerles el pago de entre 2.500 y 3.000 euros por empleado para compensar el ajuste salarial que arrastran en la mercantil
VALENCIA. Fernando Roig ya cuenta con el respaldo de los trabajadores de TAU Cerámica para comprar la azulejera. El comité de empresa de la mercantíl sometió a votación este lunes la propuesta del dueño de Pamesa para hacerse con la unidad productiva de su -hasta la fecha- rival en el sector cerámico. Los empleados presentes en la asamblea brindaron su apoyo unánime a la oferta del empresario, según informaron fuentes sindicales.
El visto bueno a la puja de Roig por la unidad productiva de TAU se produce tras la reunión que mantuvo el dirigente el pasado viernes con el comité de empresa, en el que les trasladó que, en caso de que resulte vencedor de la subasta, ofrecerá una paga de entre 2.500 y 3.000 euros por trabajador correspondiente al ajuste salarial que sufre la plantilla por la entrada en concurso de la matriz Taulell. La medida coincide con con lo que plantean firmas como Gedesco en su puja por la unidad productiva.
El espaldarazo que recibe Roig de los empleados lo equipara al resto de las candidaturas finalistas (las de Sherpa Capital, Gedesco, Snel Business e Indes Capital) cuyo informe favorable fue emitido por la plantilla antes de que se cerrara el proceso de presentación de pujas a la primera subasta, según ha podido saber este diario.
Como desveló Valencia Plaza, la puja económica más alta por la unidad productiva de TAU Cerámica es la presentada por Sherpa Capital, cuya oferta asciende a los 23,1 millones de euros, seguida de las de Snel Business SL (8 millones), Gedesco Finance SL (7,7 millones) y Portovan SL -la sociedad del Grupo Pamesa- (5,5 millones). No obstante, el importe económico no es el único factor a tener en cuenta en este proceso.
Aspectos como la forma y los compromisos de pago, el abono de las deudas con la Seguridad Social, los avales presentados, la intención de quedarse o no con las existencias o -en el caso particular del Grupo Pamesa- el compromiso de adquirir además los inmuebles de la fábrica podrían inclinar la balanza hacia otras candidaturas.