VALÈNCIA (EFE). Alrededor de 80 trabajadores de UGT se han concentrado este miércoles ante la sede del sindicato en València en protesta por el bloqueo en la negociación del convenio colectivo de UGT después de siete reuniones "sin avances", y han denunciado la pérdida de poder adquisitivo desde 2021.
La protesta ha sido una de las convocadas por los trabajadores en varias comunidades como Andalucía, Baleares, País Vasco, Madrid, La Rioja, Murcia o Extremadura para "visibilizar el problema" que existe desde la impugnación del convenio y después de haber realizado movilizaciones internas, según Francisco Palomar, portavoz de la protesta en València.
Tras la última reunión de la mesa negociadora del Convenio Colectivo Marco de UGT, celebrada el 29 de marzo, la patronal sindical con sus propuestas "demostró nuevamente que sus únicos objetivos son acabar con el convenio y recortar los derechos laborales de los trabajadores de UGT", indican.
Según Palomar, "es contradictorio y nos duele en el corazón, pero creemos es la única manera" de desbloquear el convenio.
Advierte de que si la negociación continúa como hasta ahora, no descartan hacer una convocatoria conjunta de comunidades para una protesta en la sede central del sindicato en Madrid.
UGT "nos ofrece bastante menos" de lo que el propio pide sindicato reivindica en otros convenios y los trabajadores "no pedimos subidas por encima del IPC, sino lo mismo que en otras negociaciones", según defiende, para añadir que el sindicato exige fuera "lo que no es capaz de ofrecer a sus trabajadores".
La subida salarial propuesta para 2022 es del 2,8 % sobre salario base, y para 2023 un incremento del 2,5 % con una cláusula de revisión de un porcentaje medio de los incrementos salariales que se obtengan en el sector de oficinas y seguros, lo que para los trabajadores no tiene "ninguna lógica económica".
Además, insisten en la pérdida de poder adquisitivo con un IPC disparado y el recorte de derechos laborales ya que, según fuentes de los trabajadores, UGT propone eliminar, para las nuevas incorporaciones, la gratificación de jubilación, reducir las cantidades para los trabajadores que cumplen con la antigüedad e imponer que en todos los organismos la jornada continuada sea solo de dos meses (julio y agosto).
También quiere establecer una cláusula de nueva redacción con la que se pretende que, de forma unilateral, se pueda acordar el descuelgue del convenio sin necesidad de justificación y negociación, unas propuestas que califican "de retroceso y que avergüenzan a cualquier sindicalista".
En la Comunitat Valenciana UGT PV tiene 110 trabajadores asalariados.