VALÈNCIA (EFE/EP). La vicepresidenta y consellera de Igualdad y Políticas Inclusivas, Aitana Mas, ha considerado que "una 'ley seca' contra la prostitución solo serviría para esconder un problema que tiene componentes sociales muy complejos" y ha reconocido que no existe "una posición única" en el seno del Consell.
Así lo ha considerado en la rueda de prensa posterior al pleno del Consell, a preguntas de los periodistas sobre la doble modificación legislativa que reclama el PSPV-PSOE para avanzar hacia la abolición de la prostitución en la Comunitat Valenciana.
"No hay una posición única, es evidente", ha destacado, y ha añadido que el tema no se ha debatido ni tratado en el pleno del Consell de este viernes.
Mas ha recordado que "no es una cuestión que esté en el acuerdo del Botànic" ni que haya formado parte de los seminarios de gobierno que definen las líneas de acción, y ha asegurado que "no ha habido tampoco debate entre los diferentes departamentos".
En cuanto a la modificación que propone el PSPV, ha dicho que se basa en "un anteproyecto de ley que recibió alegaciones tanto de consellerias como de asociaciones".
"Yo hago una reflexión: yo creo que una 'ley seca' para la prostitución solo serviría para esconder un problema que tiene componentes sociales muy complejos y que se tendrían que tratar más allá de una estrategia punitiva", ha manifestado.
A su juicio, "lo primero no es legislar fines concretos que están más alejados de la realidad, sino procurar que la normativa no perjudique a la parte más vulnerable".
La vicepresidenta también ha defendido las políticas del Consell en esta materia y ha destacado que Labora "ha formado e incorporado a mundo laboral a 99 mujeres víctimas de trata", además de referirse al programa Alba, en marcha en la Conselleria de Igualdad desde 2021, que ya ha atendido a 2.000 mujeres en esta situación.
"Hablamos de elementos y de políticas que van a la raíz del problema y que ponen medidas reales y efectivas", ha subrayado Mas, que en cualquier caso ha concluido que el debate "se ha trasladado a Les Corts y serán los grupos los que tendrán que decidir".
Mas ha considerado también que los beneficios de las entidades bancarias que se están conociendo estos días son "desproporcionados" en un momento de inflación como el actual.
"Somos partidarios de las medidas que pueden favorecer que las familias lleguen a final de mes", ha destacado la también dirigente de Compromís, que se ha referido a "la persona que vea las noticias y vea que le suben la hipoteca 80 o 100 euros al mes y que, aunque suben el Salario Mínimo Interprofesional, ambas cosas se anulan entre ellas".
"Esto no tiene sentido en un momento de inflación", ha lamentado, y ha apostado por tomar "todas las medias que sean dialogadas, pactadas y tengan una traslación en poder ayudar a las familias que ven todos los días las noticias atónitas, ante una situación que no tiene ni pies ni cabeza".
Asimismo, ha denunciado que en la crisis financiera de 2008, los bancos "dijeron: 'apriétense el cinturón, han vivido por encima de sus posibilidades".
"Dimos una gran cantidad de millones y millones de euros y los rescatamos a cambio de que nos hicieran más difícil acceder a las hipotecas", ha criticado, y ha llamado, "como mínimo, a hacer una reflexión".
Mas también se ha referido a la posibilidad de "tener una interlocución" que pueda "en cierta manera casi que ejecutar el Artículo 128 de la Constitución y acercar la actividad económica a la ciudadanía".
El artículo 128 de la Constitución al que ha hecho referencia establece que "se reconoce la iniciativa pública en la actividad económica" y que "mediante ley se podrá reservar al sector público recursos o servicios esenciales, especialmente en caso de monopolio y asimismo acordar la intervención de empresas cuando así lo exigiere el interés general".
Preguntada sobre cómo calificaría dichos beneficios en un momento como el actual, de inflación, ha dicho que le parecen desproporcionados.
La vicesecretaria general y de Igualdad del PSPV, Ana Domínguez, ha insistido en que la abolición de la prostitución es un objetivo "fundamental e irrenunciable" en la "agenda feminista" de su partido: "No podemos no hacer todo lo posible".
En un comunicado, la socialista ha defendido que "para el feminismo no hay mujeres de primera ni mujeres de segunda" y ha recalcado: "En la medida en que las víctimas de la prostitución son víctimas de violencia machista, no podemos no hacer todo lo posible para poner fin a esta forma de esclavitud de las mujeres".
"Para el PSPV es irrenunciable dar todos los pasos que podamos en el camino de la abolición de la prostitución. No entendemos otra manera, porque no la hay, de ser feministas", ha abundado.