Puig, Oltra y Martínez Dalmau en la primera reunión tras las elecciones. Foto: EVA MÁÑEZVALÈNCIA. El futuro Consell que saldrá del Botànic II, como así se denomina el acuerdo entre PSPV-PSOE, Compromís y Unides Podem-EUPV, no será finalmente demasiado revolucionario. Más bien todo lo contrario. Tras los primeros días de negociación, se abandonó la idea de crear un macrogobierno de 14 o 15 departamentos y las distintas fuerzas apostaron por un Ejecutivo con una docena de carteras, dos más de las que existen actualmente.
Una decisión que obligaba a aglutinar competencias y, por tanto, a dirigirse a un gobierno más similar al de la legislatura saliente. Así, a falta de que se cierre definitivamente el acuerdo, solo habrá dos consellerias absolutamente nuevas: Ciencia, Innovación y Universidades, que controlará el PSPV-PSOE y que probablemente sea liderada por un independiente; y Vivienda y otra competencia por definir, un departamento ideado para que sea capitaneado por el candidato de Unides Podem, Rubén Martínez Dalmau.
En el resto, pocas variaciones. Una de las novedades es la modificación de Transparencia, que ahora encabezará el área de Memoria Democrática y también contendrá Cooperación. Una cartera que a priori dirigirá Esquerra Unida, con Rosa Pérez posiblemente al frente.
En las grandes áreas las modificaciones apuntan a ser mínimas en el grueso de las competencias, empezando por Presidencia y Vicepresidencia. El socialista Ximo Puig apunta a mantener buena parte de sus áreas mientras que Mónica Oltra seguirá, salvo sorpresa, al frente de las Políticas Inclusivas. Pese a las intenciones de varios de los candidatos, Cultura no se separará de Educación, que continuará regida por Compromís, y tampoco se incluirá finalmente Empleo en el mencionado departamento. Una posibilidad que estuvo sobre la mesa al inicio de las negociaciones.
De la misma manera, Economía se mantendrá precisamente con Empleo y probablemente con las competencias que asumía a través del Ivace y también en lo relacionado al área Industrial. Una cartera que seguirá controlada por Compromís.
En esta línea, en Sanidad, Hacienda y Justicia no se esperan tampoco grandes modificaciones y continuarán salvo sorpresa siendo dominadas por los socialistas. También Obras Públicas, si bien la pérdida de Vivienda requerirá una reformulación de este departamento.
Otra de las posibilidades que se estudiaba era la separación de Agricultura y Medio Ambiente, si bien fue conjurada ante el desistimiento de un aumento de consellerias. Asi, todo indica a que seguirá en manos de Compromís tal y como ocurría en esta legislatura.
