MADRID (EP). Endesa ha actualizado su política de dividendos para el periodo 2024-2026, manteniendo un 70% de 'pay out' para el trienio, aunque situando el suelo en la retribución a sus accionistas en 1 euro por acción, con la previsión de poder alcanzar los 1,5 euros en 2026, informó la compañía, que mantiene sus inversiones para los próximos tres años en casi 9.000 millones de euros.
Esta decisión se produce tras el laudo dictado por la Corte Internacional de Arbitraje de la Cámara de Comercio Internacional (ICC), por el que la energética deberá abonar unos 570 millones de dólares (unos 530 millones de euros) a QatarEnergy, compañía estatal de Qatar, por la revisión del precio de un contrato de aprovisionamiento a largo plazo de gas natural licuado (GNL).
La energética contiene así su política de dividendos con respecto a su anterior plan. Mantiene el euro por acción para este 2023, con un pago ya a cuenta de 0,50 euros aprobado a pagar en enero, mientras que para 2024, cuando preveía 1,2 euros, garantiza ese suelo de 1 euro, aunque aspira a alcanzar los 1,1 euros, y en 2026 confía en alcanzar los 1,5 euros por título. El grupo destacó que el objetivo de retribuir a sus accionistas con 1,5 euros brutos en 2026 supondría una rentabilidad por dividendo del 8%. Para ello, Endesa se fija como objetivos para 2026 alcanzar un beneficio bruto (Ebitda) de entre 5.600 y 5.900 millones de euros, un beneficio ordinario neto de 2.200-2.300 millones, una deuda financiera neta de 8.000-9.000 millones.
En un contexto de crecimiento de costes financieros y de inflación, la energética mantendrá un plan continuista con respecto al anterior, con una inversión bruta para el periodo 2024-206 que se situará en 8.900 millones de euros. En concreto, redes de distribución y generación renovable, serán los dos de los pilares de la electrificación limpia, que se mantienen como ejes clave para el crecimiento de la compañía. Así, de este esfuerzo inversor del grupo en el periodo, 2.800 millones de euros brutos tendrán como destino las redes de distribución, 200 millones más que en el plan anterior pendientes de una mayor visibilidad sobre la revisión regulatoria.
Renovables, mientras, será la partida inversora más importante con 4.300 millones de euros, misma cifra que en el plan precedente, con un mayor peso de la eólica para alcanzar los 13.900 megavatios (MW) de capacidad renovable a final de 2026 y con Andorra, Pego y los 800 MW eólicos de Galicia como proyectos estrella; y 900 millones para el área de clientes para alcanzar los 7,5 millones en el mercado libre en la Península Ibérica al final del trienio, al tiempo que la electrificación de todos los usos energéticos guía la estrategia comercial.
Además, Endesa mantiene su objetivo de la plena descarbonización en 2040, con la salida del carbón en el negocio insular como hito intermedio en 2027. Todo ello después del cierre en este año de la última central de carbón en la Península, As Pontes. El 93% de la producción peninsular de la eléctrica estará libre de emisiones en 2026, desde el 79% a cierre de este año.