VALÈNCIA. Nos encontramos en medio de otro nuevo conflicto armado, cuando ni siquiera ha finalizado el que llenaba las portadas de apenas hace unos días. Una nueva prueba de fuego para los inversores y los mercados financieros. Como consecuencia del temor, la retirada de fondos en bolsa suele ser algo habitual. Lo adecuado, en cambio, sería mantener la cabeza fría y no dejarse llevar por las emociones. Difícil de poner en práctica, por supuesto, pero sin duda el mejor consejo que alguien le puede dar por muy contradictorio que pueda sonar.
Para no tomar decisiones inadecuadas es importante que exista otro 'motivador' aparte de la pura búsqueda de rentabilidad cortoplacista. En este sentido, el tema del agua y su escasez es un buen ejemplo. El afán de estar expuesto aquí con ahorros es por tratarse de un problema consciente, sencillo de entender para todos y que necesita acciones urgentes. Partimos desde el planteamiento de que las empresas bien posicionadas, tarde o temprano tendrán que beneficiarse y que solo es una cuestión de tiempo. Si esto es así, ¿se plantearía usted vender sus posiciones cuando aparecen curvas en el camino debido a 'tormentas' puntuales de ámbito económico o por algún conflicto bélico descontrolado? La sencilla respuesta a esto es no.
Es cuestión de desarrollar la paciencia necesaria en estas situaciones para aguantar lo que realmente es valioso en su cartera de inversión. Con el cambio climático, el suministro adecuado de agua no solo es un problema en Oriente Medio o en los países de tercer mundo. La sequía del verano pasado en muchos puntos de España está todavía muy presente; mientras que todo hace indicar que esos fenómenos serán algo habitual en el futuro.
Para solucionarlo se necesitará inversión en investigación, infraestructura y una completa modernización de los sistemas de tratamiento y suministro actuales. Las empresas con soluciones innovadoras en el tratamiento, el agua potable y los sistemas de riego son las que tienen mucho por ganar y acaparan el interés de los inversores que buscan exposición al sector.
Además, invertir en el 'oro azul' -como algunos ya denominan este bien necesario- tiene una componente altamente ecológica, lo que contribuye a una mayor sostenibilidad del planeta. Pero su escasez no solo es debido al cambio climático por cuanto hay varios factores que nos han llevado a esta situación. La falta o la mala calidad de infraestructura para el tratamiento, el incremento de la populación mundial, el calentamiento global y unas limitadas reservas en agua dulce, son solo algunos de los motivos.
Asimismo, sorprende que del total de 75% de la materia que representa el agua en el planeta solo un 2% se aprovecha debido a la poca agua dulce disponible. Y de esta, la mayor parte se utiliza para fines del sector agrícola y solo un tercio para el tratamiento de agua potable. El reto, por tanto, es diseñar unos procedimientos en producción agrícola más sostenibles para rebajar el consumo de agua, hacer más eficientes el tratamiento y suministro del bien en general y desarrollar todo tipo de métodos que contribuyan al ahorro.
Para tener una idea de lo que está disponible para invertir en temáticas del agua, vale la pena echar un vistazo a las empresas cotizadas reunidas bajo el índice S&P Global Water. Este índice incluye a las 50 mayores empresas del sector con cierto peso en la energía hidroeléctrica pero también en todo tipo de temas que envuelven el tópico del agua. Un extendido número de estas empresas se encuentran en Estados Unidos; mientras que en Europa no vamos por detrás, solo que el tamaño de las compañías es menor y pocas entran, hoy por hoy, en este índice.
Por supuesto, también se puede apostar mediante fondos de inversión cotizados o ETFs del sector agua. Aunque cada vez existen más productos para invertir, no todos son comparables y vale la pena hacer un buen análisis de cada iniciativa. Un asesor financiero cualificado le podrá aportar información adicional valiosa para encontrar los productos que mejor le pueden encajar. Finalmente, el consejo profesional siempre hará que la información sobre la que basara su toma de decisión sea más completa. Un aspecto que no es de subestimar.
Christian Dürr es socio-director de ETICA Patrimonios EAF