El solar que albergará el edificio de alojamiento flexible de Kategora, en el que todavía figuran los carteles de la promoción planteada por Aligrupo. Foto: RAFA MOLINAALICANTE. La promotora vasca Kategora se suma al boom de la oferta de alojamientos en la ciudad de Alicante con un proyecto para la construcción de un flex living con 140 estancias o apartamentos en la avenida de Doctor Gadea. La propuesta -que sigue la estela de otros proyectos previos ya asentados en la ciudad como el coliving de Suiters (Grupo Marjal) en Alfonso el Sabio- llega de la mano de su filial Kategora Alicante Development, que acaba de solicitar licencia de obra y actividad para su desarrollo en el solar situado entre los números 3 y 5 del céntrico paseo, justo frente a la sede de la Fundación CAM, entre Gadea y Arzobispo Loaces.
Kategora cerró un acuerdo de compra sobre dicho solar propiedad de Aligrupo, el pasado otoño, lo que supuso el descarte del proyecto con el que la promotora de los fundadores de Goldcar pretendía desarrollar su primer residencial en el Centro de Alicante, Gadea Residencial, con 22 viviendas exclusivas.
En ese momento, la propuesta cedió paso al alojamiento flexible promovido por Kategora, para el que prevé la construcción de un edificio con dos plantas de sótano, siete alturas y ático que estará provisto de servicios propios de un hotel como la incorporación de un restaurante en su planta baja, un gimnasio y una piscina descubierta de 34 metros cuadrados en su ático.
Según el proyecto, las plantas de sótano estarán destinadas a albergar cuartos técnicos, vestuarios, garaje de vehículos, locales técnicos y vestuarios de empleados. En la planta baja acogerá la recepción general, zonas comunes, el restaurante y una cafetería. En la planta primera, se habilitará una zona de coworking, los primeros apartamentos, así como un área de baños comunes. El resto de apartamentos se distribuirán entre la planta primera y la quinta. La sexta también acogerá parte de ellos, además de la terraza y el gimnasio. Por último, la séptima también quedará reservada para apartamentos, así como el ático, en el que también se ubicará la piscina.
Vista del solar, frente a la Fundación CAM.
Perspectiva desde Arzobispo Loaces.En su conjunto, se prevé que el edificio pueda albergar una ocupación máxima de 610 personas y que su construcción pueda completarse en un plazo de ejecución de solo diez meses. Por lo pronto, Kategora estima que el complejo podrá estar en funcionamiento en 2026 bajo la gestión de la marca hotelera Kora Living, bajo su línea 'Urban', según se avanza en su propia página web corporativa.
Kategora destaca, además, que el diseño del edificio está concebido para ser un "referente de emisión cero", ajustado al objetivo de búsqueda de sostenibilidad que caracterizaría todos sus proyectos desde su nacimiento, en 2006, en Bilbao (aunque, en un primer momento, cimentó su crecimiento en Hungría y Polonia). En esta línea, el flex living de Gadea contará con el certificado de construcción Breeam "que mejora la funcionalidad, flexibilidad y durabilidad de los edificios". "Dicho certificado promueve el ahorro energético, el reaprovechamiento del agua de lluvia y aguas grises, así como la sostenibilidad medioambiental de la construcción, generando eficiencias y asegurando el respeto por el entorno", añade la promotora.
Además, incide en que el inmueble "contará con una imagen acogedora, entre doméstico y singular, con terrazas en todas las habitaciones y usos comunes de interés urbano como una piscina, varios restaurantes y un jardín interior como extensión del edificio". Asimismo, dispondrá de plazas de aparcamiento de vehículos, carga de coches eléctricos y plazas de bicicletas.
Se da la circunstancia, además, de que el living de Kategora quedará posicionado justo frente a otro edificio destinado al alojamiento en el extremo opuesto del paseo de Gadea: el hotel boutique promovido por Balazs tras la remodelación integral de la antigua pensión Santa Lucia. Los trabajos de reconversión de ese inmueble preexistente ya se han iniciado con la ejecución de demoliciones internas, después de varios meses de trámites de consultas previas en los que se certificó que el inmueble no queda contemplado en el catálogo de protecciones, según precisaron fuentes municipales.
