WASHIGTON (EP). Los miembros del Comité Federal del Mercado Abierto (FOMC) de la Reserva Federal (Fed) de Estados Unidos dejaron abierta la vía a seguir elevando los tipos de interés en 2018 en su última reunión de junio, aunque plantearon por primera vez en un año la posibilidad de una recesión.
Así se desprende de las actas del último encuentro del banco central estadounidense, presidido por Jerome Powell desde el pasado 3 de febrero, que tuvo lugar durante el pasado 12 y 13 de junio, en el que se señala que algunos participantes plantearon el riesgo de una posible recesión económica como consecuencia de un periodo prolongado de tiempo en el que la economía podría estar operando por encima de su potencial, lo que introduciría "elevados" riesgos inflacionarios.
Se trata de la primera vez desde la reunión que el FOMC mantuvo en el mismo mes de hace un año que se vuelve a citar los riesgos de que la economía estadounidense podría entrar en una nueva recesión económica, ya que, desde entonces, en todas las reuniones se ha estado desechando esa posibilidad. No obstante, las actas muestran que el crecimiento de la economía "está progresando" en línea con las expectativas, al mismo tiempo que se está consiguiendo un mercado de trabajo "robusto" y un objetivo de inflación cercano al 2%, lo que permite seguir con el resto de alzas esperadas para el resto del año.
Además, algunos participantes también hicieron hincapié en comenzar a cambiar el lenguaje de la Fed, de forma que se modifique el mensaje de que todavía se mantiene "la política acomodaticia" en el marco del programa expansivo de 'forward guidance', puesto que "ya no es apropiado" con la actual "fortaleza" económica del país. De las cuatro reuniones mantenidas por el FOMC en lo que va de año, la Fed ya ha subidos dos veces los tipos de interés, ambas con Powell al frente, después de que tanto en el encuentro de marzo y en el del pasado mes de junio decidieran por unanimidad aumentarlos, hasta un rango objetivo de entre el 1,75% y el 2,00%.
Por otra parte, las actas de la reunión del pasado mes de junio muestran "preocupaciones" por los posibles efectos adversos en los que podría incurrir los aranceles y otras políticas restrictivas al mercado impuestas por la Administración Trump en la inversión, tanto doméstica como internacionalmente. De hecho, según los contactos que ha mantenido la Fed con algunos distritos del país, los planes para aumentar el gasto en capital se ha restringido o, incluso, se han pospuesto como resultado de la "incertidumbre" en materia de política comercial.
"Los riesgos asociados a las tensiones globales en materia comercial se han intensificado y podrían provocar efectos negativos en el la confianza empresarial y en el gasto en inversiones", señalan las actas.