VALÈNCIA. (EFE) La Fiscalía y el resto de acusaciones que atribuyen administración desleal por una operación inmobiliaria de Banco de Valencia y Bancaja en Costa Bellver, en la localidad castellonense de Oropesa del Mar, han ratificado este jueves sus informes en la penúltima sesión del juicio, que concluye este viernes con la lectura de informes de las defensas.
A falta de las conclusiones de estos alegatos y a expensas de que alguno de los acusados quiera hacer uso de su derecho a la última palabra, este viernes quedará visto para sentencia el juicio a los ex consejeros delegados del Banco de Valencia Domingo Parra y Aurelio Izquierdo -también ex director general de Bancaja-, y los hermanos Calabuig por administración desleal en la operación inmobiliaria Costa Bellver.
En la penúltima sesión celebrada este jueves en la sede que la Audiencia Nacional tiene en San Fernando de Henares, las acusaciones se han reafirmado en sus tesis, y según la Fiscalía, la abogacía del Estado y los pequeños accionistas hubo administración desleal en la operación inmobiliaria Costa Bellver.
En su informe final, la Fiscalía se ha ratificado en su informe inicial y ha destacado el valor de los inmuebles incluidos en la operación inmobiliaria, y en las discrepancias entre los peritos sobre la tasación.
La abogada del Estado ha puesto el foco en cómo los acusados "antepusieron sus intereses a los de las entidades que representaban", en tanto que el letrado del FROB ha recordado que la entidad tuvo que ser rescatada con dinero público.
En la causa figuran como imputados los exconsejeros delegados de Banco de Valencia Domingo Parra -que alcanzó un acuerdo de conformidad con la Fiscalía y ha aceptado todos los cargos- y Aurelio Izquierdo, y los hermanos Calabuig.
Los hechos se remontan a 2009, cuando Bancaja Habitat, que posteriormente daría lugar a Bankia Habitat, se hizo con un 46,40 % de Costa Bellver, sociedad dedicada al desarrollo inmobiliario, mediante la adquisición de 773 acciones.
De esas 773 acciones, 536 fueron adquiridas a Aguas de Valencia por un importe de 42,2 millones de euros -84.425 euros por acción, y otras 237 a la familia Calabuig y a Fomento Urbano de Castellón (Fucsa), también controlada por los hermanos, por un importe de 19,8 millones de euros, -83.780 euros por acción-.
En total, Bancaja Habitat invirtió 65,1 millones de euros en acciones de Costa Bellver.
Fucsa y los miembros de la familia Calabuig habrían generado unas plusvalías muy elevadas derivadas de la venta de dichas acciones por importes muy superiores al precio pagado en su adquisición; en concreto, un informe de KPMG estima que los Calabuig obtuvieron por este concepto más de 90 millones de euros.
Parra e Izquierdo tenían una relación comercial anterior con los Calabuig, ya que a través de la sociedad Gestor Inversiones IZPA, controlada al 50 % por ambos, realizaron distintas operaciones mercantiles con los hermanos, lo que implica un "patente conflicto de interés".