Foto: EDUARDO PARRA/EPVALÈNCIA (EP). La Unión de Consumidores de la Comunitat Valenciana considera que el acceso no autorizado a una base de datos del Banco Santander "pone de manifiesto la vulnerabilidad del sistema de protección de datos personales y privados de las personas consumidoras" y ha instado a las entidades bancarias a mejorar la protección de sus clientes.
La organización de consumidores ha advertido en un comunicado que este tipo de situaciones "pueden facilitar intentos de fraude y suplantación de identidad con el perjuicio económico que puede ocasionar a los consumidores y usuarios".
Por ello, recomienda que las personas consumidoras "extremen las precauciones a la hora de identificar cualquier llamada, sms o correo que puedan recibir aun cuando de los datos que les puedan indicar parezca que proviene de una fuente de confianza" y contacten con su sucursal o entidad financiera, organismos de consumo e incluso Policía para consultar si podrían estar siendo víctimas de un fraude.
"Los fraudes informáticos cada vez están más perfeccionados, con información muy concreta que pueda hacer dudar a las posibles víctimas dela identidad de quien les ha contactado", ha alertado y recomienda que, si se sospecha que ha sido víctima de una estafa bancaria, contactar "inmediatamente" con la entidad financiera "para solicitar la paralización de cualquier movimiento o cargo bancario" y denunciar ante la Policía.
Por ello, la Unión de Consumidores de la Comunitat Valenciana ha instado a la administración y a las entidades financieras a establecer "mecanismos de verificación fidedigna" en los contactos que realicen a sus clientes para garantizar comunicaciones seguras.
En este sentido, el secretario de la Unión de Consumidores de la Comunitat Valenciana, Vicente Inglada, ha considerado que las entidades financieras "no pueden hacer únicamente responsables a sus clientes de las posibles consecuencias económicas que pueda ocasionar el acceso a sus datos personales y privados".
Además, según ha apuntado, "no hay que olvidar el nivel de desprotección en la que se encuentra el consumidor ya que no dispone de las mismas herramientas de seguridad que las entidades financieras".
