Las cooperativas de crédito valencianas siguen en su línea ascendente de depósitos

VALÈNCIA. Las cooperativas de crédito de la Comunitat Valenciana cerraron el primer trimestre con un incremento del 1,11% en lo que a sus depósitos se refiere. Así lo recoge el último informe del Instituto Valenciano de Finanzas (IVF), que ya avanzó este diario el pasado martes advirtiendo que el proceso de desapalancamiento bancario sigue en curso con el cierre de 67 oficinas más entre enero y marzo de 2017 en algún punto de València, Castellón y Alicante.

En dicho informe se recogía que los depósitos del sector público y residente de la banca domiciliada en la Comunitat Valenciana -la treintena de cajas rurales, Caixa Ontinyent y Bankia, que no hay que olvidar que tiene aquí su sede social- habían crecido en tasa de variación anual un 3,84%. Concretamente un 4,28% para los bancos y cajas de ahorro -o mejor dicho caja- y un aumento del 1,11% para las cooperativas de crédito. De este modo, las cajas rurales siguen en su línea ascendente de depósitos iniciado en 2013, según los datos oficiales de la institución dirigida por Manuel Illueca recogidos en la tabla adjunta.

"La desaparición de un buen número de sucursales bancarias en pequeñas poblaciones ha provocado que no pocos depositantes hayan llevado su dinero a las rurales y todo hace pensar a que el proceso se mantenga a la vista de los nuevos cierres que se avecinan en el sector ante otro proceso de concentración bancaria", apuntan fuentes cooperativistas consultadas por este diario. "Las cooperativas están haciéndose cada día más con el nicho que ocupaban las extintas cajas de ahorros en los pueblos de la geografía valenciana por su proximidad y la confianza que nos estamos ganando en los últimos años", añaden no sin falta de razón.

Sin embargo, también hay que tener en cuenta otro factor como es el de la salida de depósitos hacia los fondos de inversión ante la política monetaria ultralaxa del Banco Central Europeo (BCE). Una circunstancia que ha provocado que dos de los otrora vehículos de ahorro más demandados por los españoles más conservadores -Letras del Tesoro y depósitos bancarios- ofrezcan pírricos intereses. De ahí que cada vez más se tenga que asumir algo de riesgo en busca de mayores rentabilidades.

Al cierre del primer trimestre, la cuota de mercado de las cajas rurales valencianas en cuanto a depósitos se refiere casi duplicaba a la de los bancos y cajas de ahorro (13,64% frente al 7,68%). En este sentido conviene recordar que la Comunitat Valenciana cuenta con una treintena de cooperativas de crédito, prácticamente la mitad de las existentes en todo el territorio nacional.

Sin embargo, las cifras absolutas, sin duda condicionadas por el 'efecto Bankia', reflejan que de los casi 97.000 millones de euros en depósitos a 31 de marzo pasado en el sector bancario autonómico, casi 84.000 millones de euros estaba en manos de los bancos y cajas de ahorros donde ni que decir tiene que buena parte del mismo procedía de la entidad presidida por José Ignacio Goirigolzarri. Las cooperativas de crédito totalizaban a esa fecha algo más de 13.000 millones de euros en depósitos.