Los extranjeros vuelven a comprar viviendas en Valencia y las ventas superan niveles prepandemia

VALÈNCIA. Los extranjeros vuelven a comprar viviendas en la provincia de Valencia. Después de la ralentización de las operaciones en todo el país estos últimos años por las restricciones derivadas de la pandemia, en 2021 las transacciones se reactivaron en la plaza valenciana. Tanto es así, que el número de compraventas por parte de clientes internacionales no solo se retomó, sino que incluso superó los niveles previos a que estallara la crisis sanitaria.

Así consta en la estadística del Colegio Notarial de Valencia, que refleja que en la provincia de Valencia se realizaron 42.451 compraventas en 2021, de las que el 16,9%, es decir, 7.171 unidades, fueron de extranjeros y el 83,1%, 35.280 viviendas, de clientes nacionales. A nivel autonómico, se cerraron 103.600 operaciones, de las que 31.013 compraventas procedieron de compradores internacionales, principalmente en la Costa Blanca.

Y es que la provincia Valencia sigue muy lejos de las cifras de Alicante, que contó en 2021 con más de 21.451 ventas a extranjeros, el 44,6% del total de las transacciones en la provincia. En Alicante, la mayoría de operaciones se cerraron en la costa para segunda residencia por parte de clientes británicos, belgas y suecos, mayoritariamente.

No obstante, poco a poco la provincia valenciana va tomando posiciones. Así, mientras en 2016 se vendieron 4.511 viviendas a clientes del exterior; en 2017 fueron 5.892; en 2018, 6.948; mientras que en 2019 se mantuvieron prácticamente similares con 6.982 viviendas vendidas. Ya en 2020 bajó el número de operaciones hasta las 5.082, pero el pasado año 2021 la curva dio un giro al alza con el cierre de 7.171 compraventas, la cifra más alta en estos últimos ejercicios, según los datos de los notarios.

También la cuantía media de las compraventas en la provincia ascendió de forma sustancial y se situó en los 113.000 euros frente a los 100.450 euros de media que se registró en 2020. A nivel autonómico, el valor medio de las operaciones por parte de los extranjeros es algo superior al alcanzar los 167.064 euros, por el tirón de los chalés en la zona de la costa alicantina.

En cuanto a la tipología de inmuebles, la gran mayoría de las transacciones que se cerraron en la provincia valenciana fueron pisos de segunda mano, con 6.803 operaciones, el 96,45% del total, frente a las 335 viviendas de obra nueva que se vendieron, y que representaron el 3,38%. Ya de forma residual se cerraron 13 operaciones de inmuebles en construcción, tan solo el 0,16% del total.

Principales compradores 

Como viene siendo habitual en estos años, los principales compradores de viviendas en la plaza inmobiliaria valenciana proceden de Rumanía, seguido de los de Italia, Francia, Marruecos y Reino Unido. Sin embargo, en el histórico desde 2016, los rumanos y franceses son los que más inversión han hecho en el residencial de la provincia con 3.623 y 3.564 compraventas, respectivamente.

En concreto, de acuerdo con los datos, en el pasado ejercicio de 2021 los ciudadanos de Rumanía adquirieron 679 viviendas; los de Italia, 657; los de Francia, 652 inmuebles; los de Marruecos, 566; y finalmente el mercado británico se hizo con 427 casas. 

No obstante, estos destinos no son los que más han crecido en el último año ya que el cliente procedente de países como Argelia ha aumentado sus adquisiciones en Valencia. Así, los italianos son los clientes que más incrementaron porcentualmente sus compras pasando de 27 a 71 viviendas adquiridas en 2021, un 162,96% más. Tras ellos están los argelinos que pasan de 48 a 103 inmuebles, un 114,56% más; los alemanes que duplican sus compras en la provincia, como también lo hacen los italianos y los suizos.

¿Qué pasa con el cliente ruso?

Lo cierto es que, aunque el cliente ruso llegó a ser el primer comprador extranjero de viviendas en la Comunitat Valenciana hace unos años, su peso real en la compra de inmuebles en la región valenciana se ha ido resintiendo paulatinamente. El golpe definitivo llegó con la pandemia que frenó casi en seco las ventas de la mayor parte de clientes internacionales por las restricciones de movilidad. 

En concreto, el pasado año en la autonomía valenciana se adquirieron 1.185 viviendas por parte de compradores rusos. En concreto, 863 se ubicaron en Alicante; 287, en Valencia; y 35, en Castellón. Unas cifras que evidencian que este mercado no es uno de los más estratégicos para el sector inmobiliario valenciano y el conflicto actual aleja cualquier posibilidad de poder recuperarlo.

En concreto, para Valencia es el octavo país en el ranking de compraventas por parte de extranjeros con un total de 1.549 operaciones desde 2016, según los datos de los notarios. Misma posición ocupa en Alicante, en donde cierto es que hubo más adquisiciones el pasado ejercicio y en el acumulado de los últimos cinco años: 5.986 unidades vendidas. Finalmente, para Castellón representa el décimo destino de sus compradores internacionales con un acumulado desde 2016 de 166 viviendas.