VALÈNCIA (EP). Una hora de paseo a la semana se asocia a una mayor longevidad en personas de 85 años o más, según una investigación presentada en el Congreso del CES 2022 de la Sociedad Europea de Cardiología, que se celebra en Barcelona.
Independientemente de la edad, se aconseja a los adultos realizar al menos 150 minutos semanales de actividad de intensidad moderada o 75 minutos semanales de actividad de intensidad vigorosa, o una combinación equivalente. Sin embargo, en los adultos, el tiempo de sedentarismo tiende a aumentar con la edad mientras que la cantidad de actividad física disminuye.
"Los adultos tienen menos probabilidades de cumplir las recomendaciones de actividad a medida que envejecen --afirma el autor del estudio, el doctor Moo-Nyun Jin, del Hospital Sanggye Paik de la Universidad de Inje, en Seúl (República de Corea)--. Nuestro estudio sugiere que caminar al menos una hora cada semana es beneficioso para las personas de 85 años o más. En pocas palabras, caminar 10 minutos todos los días".
Este estudio examinó la asociación entre caminar y los riesgos de mortalidad por todas las causas y cardiovascular entre los adultos de 85 años o más. Los investigadores utilizaron información de la base de datos de ancianos del Servicio Nacional de Seguros de Salud de Corea (NHIS).
El estudio incluyó a 7.047 adultos de 85 años o más que se sometieron al Programa Nacional de Exámenes de Salud de Corea entre 2009 y 2014. Los participantes rellenaron un cuestionario sobre la actividad física en el tiempo libre en el que se preguntaba por el tiempo dedicado cada semana a caminar a ritmo lento, a actividades de intensidad moderada, como el ciclismo y la marcha rápida, y a actividades de intensidad vigorosa, como correr.
La edad media de los participantes era de 87 años y 4.813 (68,3%) eran mujeres. Los participantes se clasificaron en cinco grupos según el tiempo que dedicaban a caminar a ritmo lento a la semana. Unos 4.051 (57,5%) participantes no caminaban a paso lento, 597 (8,5%) caminaban menos de una hora, 849 (12,0%) caminaban de una a dos horas, 610 (8,7%) caminaban de dos a tres horas y 940 (13,3%) caminaban más de tres horas a la semana.
En toda la población del estudio, compuesta por 7.047 adultos, 1.037 (14,7%) participantes realizaban actividad física de intensidad moderada y 773 (10,9%) realizaban actividad física de intensidad vigorosa. Sólo 538 participantes (7,6%) cumplieron las recomendaciones de las directrices sobre la actividad física de intensidad moderada a vigorosa. De los 2.996 participantes que caminaron a un ritmo lento cada semana, 999 (33%) también realizaron actividad física de intensidad moderada o vigorosa.
Los investigadores analizaron las asociaciones entre caminar, la mortalidad por todas las causas y la mortalidad cardiovascular después de ajustar la energía gastada en la actividad física de intensidad moderada a vigorosa. En comparación con las personas inactivas, las que caminaban al menos una hora a la semana (es decir, las tres categorías más altas de caminantes) tenían un 40% y un 39% menos de riesgo relativo de mortalidad por todas las causas y cardiovascular, respectivamente.
"Caminar se relacionó con una menor probabilidad de morir en los adultos mayores, independientemente de que hicieran o no alguna actividad física de intensidad moderada a vigorosa --explica el doctor Jin--. Identificar la cantidad mínima de ejercicio que puede beneficiar a los ancianos es un objetivo importante, ya que los niveles de actividad recomendados pueden ser difíciles de alcanzar".
"Nuestro estudio indica que caminar, incluso una sola hora a la semana, es ventajoso para los mayores de 85 años en comparación con la inactividad total. El mensaje para llevar a casa es que hay que seguir caminando toda la vida", concluye.