La cámara baja ha acordado un nuevo paquete fiscal valorado en 900.000 millones de dólares, que representa el 4,2% de su PIB, como analiza el economista
MADRID. Tras varios meses de regateo, el Congreso de EE UU finalmente ha acordado un nuevo paquete fiscal relacionado con la pandemia Covid, por valor de 900.000 millones de dólares, 4,2% de su PIB. En nuestro escenario para la economía de EEUU en 2021 el estímulo fiscal sería moderado, 500 a 750.000 millones. Los cheques para los hogares son la principal sorpresa. Representan otros 170.000 millones de estímulo el próximo año, fuertemente impulsados por el Secretario del Tesoro Steven Mnuchin junto a los demócratas. Seguimos creyendo que este paquete de 900.000 millones es probablemente el último que veremos, dado que el Senado probablemente siga controlado por los republicanos tras las elecciones para elegir dos escaños el 5 de enero.
El caso es que se ha llegado a un acuerdo por varias razones. En primer lugar, los demócratas finalmente abandonan sus demandas de financiar los gobiernos estatales y locales ante a la resistencia de los republicanos, reacios a contemplar un “rescate” Reserva Federal de lo que consideran Estados y gobiernos locales "mal administrados". En segundo lugar, los datos macroeconómicos se han deteriorado, con fuerte aumento de las reclamaciones semanales por beneficios de desempleo y caída de las ventas al por menor en noviembre, causando ansiedad ante la temporada de compras navideñas. En tercer lugar, muchos Estados, como California, han tenido que contemplar nuevos encierros ante el empeoramiento de los contagios -en EE.UU. hay 652 nuevos casos diarios por millón de habitantes frente a 403 en Reino Unido y 280 en Alemania (media de sietes días el 20 de diciembre)-. Por último, el Congreso ha aprovechado el presupuesto para una proporción significativa de prestaciones federales de desempleo, que terminan esta semana.
Así, el nuevo paquete incluye una disposición para prorrogar las prestaciones de desempleo hasta mediados de marzo de 2021, de 300 dólares/semana, la mitad que la primavera pasada, que deben ayudar a impulsar la demanda. El paquete también incluye un cheque único de 600 dólares por adulto a los hogares, también la mitad que la primavera pasada (se limitará a personas que ganan menos de 75.000 dólares anuales). Según nuestros cálculos, estos dos paquetes representarán 270.000 millones de apoyo a los hogares la primera mitad del año. Es menor que los 2,2 billones aprobados por el Congreso la primavera pasada, que ha producido en parte un "exceso" de ahorro de 1,5 billones acumulado de los hogares estadounidenses los primeros diez meses de 2020. Además el nuevo paquete fiscal incluye 284.000 millones en nuevos préstamos del "Programa de Protección de Cheques de Pago" para pequeñas empresas, así como fondos para apoyar la vacunación, financiación de instalaciones escolares y otros, así como extensión de la moratoria de desahucios.
Además, el proyecto de ley contiene un lenguaje más explícito respecto a préstamos de emergencia de la Reserva Federal, incluyendo los destinado a compra de deuda empresarial y municipal, que finalizará en diciembre y esperamos se vuelva a autorizar rápidamente si es necesario. El Congreso ya había asignado recursos para posibles pérdidas de la Reserva Federal por invertir en activos de más riesgo de lo que normalmente se le permite. Ahora bien, el Congreso ha acordado que las actuaciones de emergencia de la Reserva Federal no se puedan reactivar sin aprobación del Congreso, respondiendo así a temores entre los republicanos de que la Reserva Federal pudiera encontrar una manera de eludir al Congreso con la nueva Secretaria del Tesoro, Janet Yellen.
El caso es que la Reserva Federal puede utilizar el Fondo de Estabilización del Tesoro, aunque esté diseñado para la intervención cambiaria del dólar. A pesar de impedimentos legales, creemos puede encontrar formas creativas de aumentar la intervención en el mercado. Después de todo, este año ya se ha roto un tabú, al comprar deuda empresarial de alta rentabilidad. Más tabúes pueden romperse los próximos años.
El contrapeso de este paquete fiscal es que el aumento de casos de coronavirus puede provocar más bloqueos en enero, con riesgo creciente de contracción del PIB el primer trimestre de 2021, ya que la vacunación masiva y una mejora considerable de la confianza no se esperan antes de finales de la primavera/principios del verano. Aunque el presidente electo Joe Biden ha descartado un bloqueo después del 20 de enero, pero no puede ser excluido. Además los datos macroeconómicos recientes han sido en su mayoría menos buenos de lo esperado.
Teniendo en cuenta todo ello, mantenemos una previsión de crecimiento del PIB de EE.UU. 2021 en 4,7%, muy por encima del consenso de 3,9%. Seguimos convencidos de que veremos mini 'boom' del consumo una vez que se hayan logrado vacunas masivas hacia finales del segundo trimestre / principios del tercero 2021. Además, consideramos que la Reserva Federal seguirá apoyando la recuperación.
Thomas Costerg es economista para EE UU de Pictet WM