VALÈNCIA. La convivencia entre los socios del Botànic -PSPV, Compromís y Unides Podem- en ocasiones es complicada. En Les Corts los tres grupos parlamentarios suelen discutir sus iniciativas antes de presentarlas para evitar escenificar sus diferencias ante la oposición o dividirse en las votaciones, pero tampoco es extraño que a veces uno de los partidos presente iniciativas por su cuenta que tensionan las relaciones entre los socios del tripartito y que acaban con rectificaciones de las propuestas iniciales.
Algo así ocurrió este miércoles con una Proposición No de Ley que había registrado el diputado de Unides Podem, Ferran Martínez, en la comisión de Economía, Presupuestos y Hacienda. El parlamentario proponía que Les Corts instaran al Consell a realizar un informe anual de evaluación de impacto ambiental sobre el proyecto de presupuestos de la Generalitat.
Este informe, según la propuesta original, debía contener "al menos, una evaluación de las políticas del Consell desde la perspectiva ecológica en el año en curso, una cuantificación y una desagregación de los recursos públicos destinados a la transición ecológica en los presupuestos del ejercicio siguiente y una valoración de la evolución de la huella ecológica en la Comunitat Valenciana".
Un redactado que el PSPV se negaba a aceptar. Según fuentes socialistas, un compromiso de ese tipo hubiera supuesto realizar informes medioambientales de cada partida de las cuentas de la Generalitat, una tarea "inasumible" para la Administración valenciana que hubiese "desbordado a los funcionarios".
Asimismo, desde este grupo parlamentario argumentan que en el supuesto de que algún año una partida no contase con el citado informe de impacto medioambiental podría derivar en problemas mayores como que, por ejemplo, cualquiera decidiera recurrirla y, con ello, no solo pudiera peligrar esa partida concreta, sino la totalidad del presupuesto aprobado por el Consell.
Con todo, tras negociar con sus socios horas antes de que se votara la propuesta en la comisión, Unides Podem registró una autoenmienda para corregir esta redacción y definir tanto el alcance que debería tener ese informe en un futuro como la intención que pretendía el grupo parlamentario con la iniciativa rgistrada.
La propuesta aprobada, finalmente, establece que la finalidad del informe anual "de impacto ambiental será la de cuantificar y hacer un seguimiento de las políticas de la Generalitat desde la perspectiva ecológica así como realizar un seguimiento de la evolución de la situación medioambiental en la Comunitat". Además, concede al Gobierno valenciano la libertad de contemplar en este lo que considere conveniente: "El contenido de este informe anual será determinado por el Consell y será susceptible de ir ampliándose anualmente en función de las necesidades".