VALÈNCIA. Enero es un mes de balance, nuevos propósitos y diferentes expectativas ante el nuevo año, pero también sirve de imagen retrospectiva para sopesar todo lo realizado el año anterior. No obstante, con las diferentes variantes de la covid-19 y el alza de contagios en enero, los diferentes grupos políticos han aplazado el repaso de su actividad en 2021. En el caso de Burjassot, la radiografía de todas las propuestas de la oposición llevadas al pleno municipal deja a dos protagonistas claros: Ciudadanos y Vox.
La formación naranja ha sido la que más mociones ha presentado durante 2021 en sesión plenaria. En total, han sido diez las proposiciones que el partido liberal ha llevado a las reuniones mensuales del consistorio, de las cuales han sido aprobadas seis. En el lado opuesto se sitúa Vox, que únicamente presentó una moción en enero del año pasado sobre el reconocimiento del TEA (trastorno del espectro autista) como discapacidad para mejorar el acceso de las personas que lo tienen al mercado laboral. Aunque este partido solo llevara a pleno una propuesta en todo el año, esta sí fue aprobada.
Muy seguido de Ciudadanos estuvo el Partido Popular, que presentó una moción menos que los naranjas: nueve en total durante el año pasado. No obstante, los populares no tuvieron el mismo apoyo por parte del pleno en sus propuestas, ya que tan solo tres fueron aprobadas durante los primeros meses de 2021.
La covid-19, el personal sanitario, la precariedad juvenil... son algunos temas que durante 2021 se han puesto sobre la mesa, de la misma manera que lo han hecho los diferentes grupos políticos de Burjassot. En concreto, en las mociones de Ciudadanos, que ha sido el grupo al que más mociones le han aprobado, destaca la relacionada con la transparencia y el estado de ejecución de las propias mociones aprobadas por el pleno, ya que demandaban que se publicaran íntegras en la web del ayuntamiento.
También los naranjas plantearon la puesta en marcha de un plan de empleo juvenil en el municipio o la implantación de un plan de acción comercial, las cuales fueron aprobadas. No obstante, otras como la demanda de acciones urgentes en la zona de Lauri Volpi fueron rechazadas.
Por su parte, el Partido Popular hizo hincapié en la covid-19 o la fiscalización a lo largo del año pasado. Entre las mociones aprobadas presentadas por el principal partido de la oposición se encuentran la bonificación del IBI (Impuesto sobre Bienes Inmuebles) o del IAE (Impuesto sobre Actividades Económicas) por la instalación de placas solares o la moción para incentivar la participación ciudadana en los plenos telemáticos.
Los dos partidos de la izquierda en la oposición de Burjassot, Compromís y Totes Podem, presentaron el mismo número de mociones el año pasado: seis cada uno. Sin embargo, mientras que a los dos regidores del partido valencianista el pleno les aprobó la mitad de sus propuestas, de las seis que presentó la única concejala en el consistorio de la formación morada ninguna salió adelante.
Entre las proposiciones de Compromís que sí fueron aprobadas destacan una sobre el control de la población de cotorras argentinas en el municipio, otra relacionada con el control de la ludopatía y la última, que tenía la intención de poner fin a todas las agresiones que padece el personal sanitario en la localidad. Algunas, como solicitar una comunidad energética local (CEL) para el municipio o instar al Gobierno de España para la mejora de la red de rodalies, fueron rechazadas.
Cabe recordar que Compromís fue en las dos últimas legislaturas socio de gobierno del PSPV-PSOE, que desde 2019 ostenta la mayoría absoluta. A pesar de ello, durante el año pasado, el equipo liderado por Rafa García aprobó más mociones a Ciudadanos que a sus exsocios o a Totes Podem.