El consejero delegado del grupo Ryanair, Micahel O'Leary, ha publicado un vídeo en redes sociales donde ha explicado que unos 40.000 pasajeros de la aerolínea se han visto afectados por retrasos y cancelaciones.
Asimismo, para la jornada de este martes espera cancelar unos 70 vuelos debido a que muchos aviones y no pudieron operar de regreso este lunes por la noche, afectando a toda la operativa del martes.
O'Leary ha señalado que este lunes fue un día "muy difícil" y que, aunque el número de vuelos afectados "es muy pequeño en comparación con los 3.200 previstos", la compañía está "haciendo lo posible" para minimizar "las molestias a los pasajeros".
Así, se han emitido correos electrónicos a los pasajeros afectados y se les ha informado sobre sus derechos. También están tratando de operar vuelos adicionales este martes para que los pasajeros puedan regresas a sus casas, aunque "es muy difícil" por el gran volumen de operaciones de estos días.
El directivo ha indicado que esperan volver a la normalidad a partir de este miércoles y pide "por favor" que los pasajeros tengan "paciencia" a pesar de lo "incómodo y difícil" que es "estar atrapado" en un aeropuerto.
El gestor de tráfico aéreo británico, NATS, sufrió este lunes un fallo técnico que imposibilitaba introducir los datos de los vuelos de forma automática, ralentizando el proceso. Por ello, se vieron obligados a restringir el tráfico con la intención de garantizar la seguridad aérea.
El problema se extendió desde el mediodía hasta pasadas las 15.00 horas. Para este lunes, festivo en el país y en plena temporada alta de agosto, estaban previstos más de 6.000 vuelos en los aeropuertos británicos.