Un 'Don Carlo' interpretado por Plácido Domingo inaugura la nueva temporada en Les Arts

VALÈNCIA.- El próximo 9 de Diciembre se inicia la duodécima temporada de abono de ópera en la Palau de Les Arts Reina Sofia. Abre el cartel el Don Carlo de Verdi. Plácido Domingo en el papel del Marqués de Posa encabeza el elenco que dirige el valenciano Ramón Tebar. Es el reclamo inicial de una temporada que ofertará 38 representaciones de ópera, 9 de ballet, 11 conciertos sinfónicos, 2 sesiones de música de cámara, 3 recitales, 5 jornadas de actividad continua y gratuita y 37 funciones de espectáculos educativos. La oferta se completa con la iniciativa Les Arts Volant (el camión escenario que representa la ópera  Bastià y Bastiana en localidades y barrios de València) y los conciertos de las bandas valencianas. Davide Livermore, Intendente-Director artístico del Palau desde 2015 explica a Valencia Plaza las claves de esta temporada.

-¿Cuáles son las fortalezas del Palau?

-La excelencia de nuestra orquesta y del Cor de la Generalitat, -este año celebra su 30 aniversario con la dirección de Plácido Domingo-;  el Centre Plácido Domingo, los grandes maestros que trabajan o han trabajado aquí y los grandes artistas o los montajes premiados en Alemania, Francia, Italia o Reino Unido. Pocos teatros del mundo pueden presumir de inaugurar temporada con Plácido Domingo, como haremos nosotros en diciembre, acompañado de primeras estrellas como María José Siri, Violeta Urmana…

 -¿Y en los circuitos internacionales qué lugar ocupa? 

-Es la puerta a la internacionalidad de la Comunitat Valenciana. Después de doce años con espectáculos al más alto nivel, Valencia es una parada obligatoria para los amantes de la ópera, que no solo quedan impresionados por el imponente edificio, sino que también lo hacen por el nivel de nuestras propuestas. Y ahí es obligatorio nombrar a Helga Schmidt y su gran empeño en que esta ciudad estuviese en el circuito internacional.

 “Valencia parada obligatoria para los amantes de la ópera”

-¿Qué sensibilidad percibe en los valencianos con la música?

-Lo primero, como valenciano de adopción, he de decir una cosa: Valencia es tierra de músicos. Un hecho que me maravilla, es que todo valenciano tiene a alguien que toca un instrumento en su familia y, en este aspecto, la labor que realizan las sociedades musicales es fantástica.

-Por su experiencia musical ¿cuál es la fuerza artística de la Comunitat Valenciana?

-Como director de escena, he podido conocer de primera mano su talento: Carmen Romeu, con la que he trabajado en La Bohème e Idomeneo o Cristina Faus, en Otello. En el foso he hecho producciones con Gustavo Gimeno, que dirigió Norma, o José Ramón Martín, que tomó la batuta en una función de Idomeneo. Además, he tenido la suerte de colaborar con Emilio López, que ha sido durante muchos años mi asistente y ahora es un prometedor director de escena.

-Los valencianos han estado desde el principio en  Les Arts,…  

- Los músicos que conforman la plantilla de nuestra orquesta, que seleccionó personalmente Lorin Maazel, o del Cor de la Generalitat son una muestra de talento valenciano. Como lo es no sólo la presencia de valencianos ya internacionales cuando nació Les Arts como Ana María Sánchez, Silvia Tro Santafé, Ofelia Sala o Isabel Rey, sino también de jóvenes cantantes con emergentes carreras como Maite Alberola o Carmen Romeu que han pasado por este teatro. Además de las voces de la Escolania de la Mare de Déu dels Desamparats. No podía faltar la inmensa nómina de directores que en el apartado sinfónico u operístico han colaborado con el teatro, desde veteranos como Enrique García Asensio o Manuel Galduf hasta valencianos con agenda internacional ahora mismo como Gustavo Gimeno, Ramón Tebar, Sergio Alapont o Jordi Bernàcer.

“La actual situación económica nos ha obligado a nuevas fórmulas para ofrecer calidad”

 -¿Qué aportan los montajes del Palau a obras ya representadas en otros teatros?

-Es obvio que la calidad es el sello de Les Arts en todas sus producciones. Así lo ve el mundo de la ópera. Montajes como El anillo del Nibelungo, con puesta en escena de La Fura dels Baus, ha viajado a lugares tan lejanos como Taiwán y Houston, Turandot se ha visto en Cantón (China) o Montecarlo, y la producción de L´elisir d´amore se ha estrenado en Bruselas, Graz (Austria) o Palermo. Sin embargo, sí que es cierto que la actual situación económica nos ha obligado a buscar nuevas fórmulas para seguir ofreciendo calidad, pero también, como se nos exige, una amplia oferta. Valencia tiene la suerte de tener un teatro con un equipo humano de grandes artistas que nos permite hacer auténtica producción propia.

-Y aquí recuerda la labor de su equipo multidisciplinar,…

-Nuestro director técnico, Manuel Zuriaga, es un escenógrafo de primer nivel; Miguel Bosch, del departamento de audiovisuales, realiza un trabajo fantástico con las videoproyecciones; en el equipo de vestuario contamos con dos creativos como Ana Armiñana y José María Adame, y para el diseño de iluminación, el talento de Antonio Castro es innegable, de hecho ha formado parte del equipo con el que he estrenado Tamerlano en la Scala de Milán.

-¿Cómo captar al público valenciano para acercarlo a la ópera?

-Desde Les Arts  hacemos muchas cosas para que todos los valencianos lo sientan como su casa. Lo hemos hecho en la pretemporada con precios populares y tarifas last minute para conciertos y espectáculos de máxima calidad, y el abono joven con el que por 60€ se pueden ver 3 óperas y las entradas se agotan. Pero no hablamos solo de precios. Más de 9.000 valencianos nos han visitado en las jornadas de puertas abiertas, otros 7.000 acudieron a la noche en blanco Nit a Les Arts,  y muy importante, nada menos que 20.000 alumnos han asistido el último año a nuestras aulas didácticas.