VALÈNCIA. El incendio forestal de Bejís ha quemado ya más de 18.000 hectáreas y ha llegado a la provincia de València, concretamente a la comarca de Los Serranos. La población de las localidades de Alcublas y Andilla está confinada por el avance del fuego hacia el sur y los bomberos han actuado contra una reproducción del incendio entre Alcublas y Altura.
Estas actuaciones se realizan con una dificultad añadida: el descenso del número de brigadistas forestales tras el cierre el pasado mes de junio de la empresa pública Divalterra, perteneciente a la Diputación de València. Tras 33 años de existencia y un recorrido marcado por presuntos delitos de corrupción, la compañía puso fin a su historia y el Consorcio Provincial de Bomberos ha adquirido las competencias.
Antes de la liquidación, había un total de 56 brigadas y 460 trabajadores, incluyendo a especialistas, conductores y capataces. Sin embargo, 79 personas decidieron optar por el ERE de bajas voluntarias planteado y ocho por la prejubilación, situando la nueva cifra en 373 profesionales, lo que supone una reducción de más de un 18% del personal.
Además, tal y como informa el Consorcio de Bomberos en su Informe de Propuesta de Reorganización del Personal de las Brigadas Forestales, en las 56 brigadas existentes hay 179 vacantes sin cubrir. Por ello, proponen una reestructuración que tiene como resultado la supresión de 19 bases en la provincia, manteniendo un total de 37 brigadas.
En los Serranos, se prevé la desaparición de las bases de Higueruelas, Benagéber y Alpuente. Esta última fue un cambio repentino, ya que en un primer momento iba a mantenerse e iba a eliminarse la de Aras de los Olmos. La alcaldesa de Alpuente, Alicia Pérez, lamenta la decisión y explica que el cierre de Divalterra se ha visto reflejado en la reducción del número de efectivos en la localidad.
Respecto a la supresión, asegura no haber recibido ninguna alternativa. "Está previsto que la reestructuración total se efectúe a principios de enero. Ahora nuestra brigada sigue yendo a nuestra base, pero les han comunicado oficialmente que en enero se van a Aras", declara.
La alcaldesa critica las consecuencias negativas que esta medida va a desencadenar, calificando como "esencial" el trabajo de los profesionales en un contexto en el que los incendios se expanden en distintos puntos de València. Esta misma semana los bomberos han actuado contra el fuego en Benaguasil y Albaida.
Además, alerta del éxodo existente en las zonas de interior: "Se habla de tomar medidas contra la despoblación, pero esto es una medida que fomenta la despoblación porque desaparecen puestos de trabajo en el municipio. Nos están echando del mundo rural". Añade: "Hay muchos kilómetros de un pueblo a otro, las distancias son muy largas, lo que supone un incremento de costes para el trabajador y un incremento de la contaminación por los desplazamientos".
El informe de reorganización propone también un plan de inversiones que incluye la construcción futura de 18 nuevas bases y la adquisición de 10 autobombas forestales. Sin embargo, mientras que a los brigadistas de Alpuente se les ha comunicado su traslado en los próximos meses, tal y como ha comunicado Alicia Pérez, las nuevas brigadas tan solo cuentan con una previsión inicial y se desconoce cuándo o dónde se instalarán exactamente.