Juan Cámara, presidente de Torrescamara. Foto: EVA MÁÑEZVALÈNCIA. La Administración de Infraestructuras Ferroviarias ha ordenado la demolición de un viaducto construido por la UTE AVE Variante de Burgos, compuesta al 50% por la constructora valenciana Torrescamara y por la madrileña Altec Infraestructuras. Adif ha tomado esta drástica decisión al considerar que la infraestructura, terminada en el año 2015, padecía "deficiencias que ponen en evidencia incumplimientos de las prescripciones técnicas que Adif exige a estructuras de estas características". La UTE, por contra, llevará a los tribunales la decisión de la firma pública, que pretende que las constructoras asuman los costes de demolición y reconstrucción, valorados en un total de 2,9 millones de euros.
En concreto, Adif, a través del Ministerio de Fomento, anunció a principios del presente mes de mayo "la demolición del tablero del viaducto de Frandovínez sobre el río Arlanzón, en el tramo Estépar-Variante Ferroviaria de Burgos, ubicado entre los términos municipales burgaleses de Frandovínez y Buniel". "Estos trabajos, que se prolongarán durante un plazo aproximado de dos meses, junto con la reconstrucción del tablero (otros tres) son el paso final para poder dar por finalizadas las obras del AVE a Burgos", agregaba la empresa pública.
Según detallaba, "en los controles de seguimiento que realiza Adif AV para garantizar la seguridad de las obras se detectaron deficiencias que ponen en evidencia incumplimientos de las prescripciones técnicas que Adif exige a estructuras de estas características". "Al tratarse de un defecto imputable al contratista, Adif ordenó a la UTE la demolición y posterior reconstrucción del tablero", afirmó la firma estatal, que agregó que "la demolición y posterior reconstrucción es la única solución que garantiza la seguridad y funcionalidad de la estructura durante toda su vida útil".
Según Adif, la UTE le comunicó el pasado 26 de enero que asumía los trabajos de demolición y posterior reconstrucción del tablero del viaducto, unas labores a las que hace frente por mandato expreso de la administración y por tratarse de una obra que no había sido entregada todavía.
El proyecto elaborado por la UTE fue entregado a Adif el 16 de febrero. Tras la revisión y aprobación del proyecto presentado por la UTE, en abril comenzaron los primeros trabajos con la ejecución de la losa de hormigón sobre la que se apoya la grúa empleada para la retirada de las porciones del tablero, a medida que éste se va cortando. Los trabajos de demolición ya se encuentran en una fase muy avanzada.
La UTE, no obstante, en absoluto está dispuesta a asumir de su bolsillo el coste de las obras de demolición y reconstrucción de la infraestructura. Fuentes conocedoras del proceso explican a Valencia Plaza que la agrupación empresarial asume por el momento con fondos propios las labores de demolición y reconstrucción porque así lo exige la Ley de Contratos del Sector Público, si bien recurrirá ante la propia administración y, posteriormente, ante los tribunales, para recuperar los 2,9 millones de euros. A su juicio, Adif ha cometido un error en la medición de los megapascales que soportaba el viaducto, tal y como acreditaría -según defiende- el Consejo Superior de Investigaciones Científicas.
Según detalla Fomento, "el viaducto sobre el río Arlanzón, ubicado entre los términos municipales burgaleses de Frandovínez y Buniel, es una estructura de hormigón pretensado de 180 metros de longitud que se apoya sobre dos pilas y dos estribos, creando tres vanos (espacio entre pilas) con luces que van de los 50 a los 80 metros". "El tablero, de tipología cajón monocelular, es continuo y de sección variable, y se ejecutó in situ con el empleo de una cimbra porticada", detalla.
La infraestructura forma parte del subtramo Estépar-Variante Ferroviaria de Burgos, que tiene una longitud de 11,5 kilómetros y discurre por los términos municipales de Estépar, Cabia, Frandovínez, Buniel y San Mamés de Burgos.
A su vez, este subtramo pertenece a la línea de alta velocidad 'Baños-Burgos-Vitoria / frontera francesa', que "se inscribe dentro del Corredor Norte-Noroeste de Alta Velocidad y forma parte del Proyecto Prioritario nº 3 del Eje Atlántico Ferroviario Europeo, dando continuidad en territorio español a la línea Madrid-Valladolid-Vitoria-Frontera Francesa", según el ministerio.
El tramo Venta de Baños-Burgos tiene 91,3 kilómetros de longitud y está diseñado para alcanzar una velocidad máxima de 350 kilómetros por hora.
