VALÈNCIA (EP). La presidenta de Ciudadanos, Inés Arrimadas, comunicó esta tarde al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, durante la reunión celebrada en el Palacio de la Moncloa, la voluntad "firme y real" de su partido de negociar los próximos Presupuestos Generales del Estado con el Ejecutivo.
La líder de Ciudadanos explicó en rueda de prensa que tienen que ser unos PGE moderados y sensatos, al margen de ideologías radicales y que no vayan en contra de los intereses del país, subrayando que se debe evitar que al final decidan "Rufián, Otegi e Iglesias" en un despacho.
Arrimadas, quien criticó la gestión del Gobierno de Sánchez en la pandemia, poniendo de relieve que España es el líder de los países de nuestro entorno, tanto en número de casos, caía del PIB o pérdida de empleo, indicó que en esta situación "es una obligación llegar a acuerdos y dejar el partidismo". Añadió que pueden equivocarse, pero que dormirán tranquilos.
Asimismo enumeró las demandas que le había hecho al presidente del Gobierno como que Sánchez asuma personalmente una estrategia nacional para la vuelta de los niños a la escuela, un plan de conciliación para los padres en el caso de que los niños se pongan enfermos, extensión temporal de los ERES y medidas de apoyo a la liquidez de autónomos y pymes.
Por su parte, la portavoz del Gobierno y ministra de Hacienda, María Jesús Montero, cree que, tras la reunión entre el presidente Pedro Sánchez y la líder de Ciudadanos, Inés Arrimadas, hay "posibilidades" de hallar "puntos de encuentro" con el partido naranja para que en el futuro, si prosperan las negociaciones, apoyen los Presupuestos Generales del Estado de 2021.
Montero ha agradecido la "voluntad sincera" de Ciudadanos para negociar y ha subrayado que, pese a las diferencias en algunos asuntos y la posición crítica del partido naranja, haya una actitud "constructiva" y ambas partes compartan un diagnóstico común sobre la situación del país tras la pandemia.
A su juicio, "hay un diagnóstico común de que es un momento excepcional que requiere una respuesta excepcional", por lo que el objetivo es buscar esos puntos de encuentro, más que ahondar en las diferencias. Ambos partidos, ha dicho, están de acuerdo en la necesidad de digitalización, de combatir el cambio climático, de apostar por la cohesión social y territorial e impulsar el crecimiento económico y ayudar a los autónomos.
En cambio, uno de los puntos de discrepancia entre el Gobierno y Ciudadanos es la política fiscal, y en ese sentido la ministra ha insistido en su idea de modular las propuestas para adaptarlas a la situación del país y encontrar "una propuesta equilibrada en materia fiscal".
Después de que el vicepresidente segundo del Gobierno, Pablo Iglesias, haya insistido en que el proyecto de Presupuestos incluirá una "revisión de la fiscalidad" en sentido "progresista", Montero ha confiado en poder encontrar un equilibrio que "acompase el crecimiento con la situación de crisis" para generar competitividad y empleo.
Montero, en cambio, ha expresado que la propuesta de Arrimadas de acordar con el PP una reforma de la Ley Orgánica del Poder Judicial para cambiar el sistema de nombramientos del CGPJ "no es compartida por el Gobierno". Previamente, la presidenta de Ciudadanos había afirmado a los periodistas que el presiente no le había dado respuesta a su petición.