VALÈNCIA. El alcalde de Gandia, José Manuel Prieto, y el regidor delegado del Puerto y Distrito Marítimo, Miguel Ángel Picornell, han informado esta mañana que la Autoridad Portuaria de València ya ha adjudicado la redacción del proyecto de urbanización de los tinglados, hecho que supone "el pistoletazo de salida para empezar la transformación del puerto de Gandia".
La adjudicación ha recaído en Tomás Llavador Arquitectos e ingenieros SL-IBIM Building Twice por un importe de 139.421 euros. En total, la iniciativa es de 6 millones de euros y será financiada íntegramente por la Autoridad Portuaria de València. Se espera la finalización de la redacción del proyecto para finales de octubre del 2024.
Prieto ha recordado que hace un año, la ciudad presentó este proyecto en FITUR, de forma que "demuestramos una vez más que nuestros proyectos no son humo sino certezas". "De la mano de la Autoridad Portuaria de València haremos del Moll Sur un espacio generador de oportunidades de primer orden y dinamizador de la economía, abierto a la ciudadanía y a nuestros visitantes. Un espacio totalmente renovado que se llenará de vida, actividad cultural, social y ocio. Es un proyecto estratégico y vital para la ciudad, para la recuperación del espacio de los tinglados y la mejora de la interacción puerto-ciudad".
La propuesta ganadora del concurso de ideas iniciado por el consistorio el 2022, "Caminos en el Mar", contempla la mejora del espacio con la generación de un paseo de acceso a los tinglados por detrás, con nuevas zonas de vegetación y cenadores para conseguir sombra. Se prevé la intervención sobre una superficie de 11.000 metros cuadrados, con el objetivo de convertirla en una zona amable donde se integran las vías del ferrocarril y a la vez se genera un vial de servicio destinado a la actividad pesquera. También se contempla una reserva de espacio para las tareas de investigación de la Universitat Politècnica de València, así como las naves dedicadas al tráfico de pasajeros.
Tal como ha explicado el alcalde, esta actuación supondrá la integración urbana entre el Grau y el puerto, acabando con las barreras arquitectónicas y físicas. "Aprovechamos un espacio que no está aprovechado. Pasamos de una zona que no se utiliza en una zona que sí que lo hará, y que supondrá un elemento revulsivo para el turismo".
La primera autoridad municipal ha indicado que en las próximas semanas se convocará una Comisión del Puerto para perfilar los usos que se otorgarán a los siete tinglados municipales, que dependen de la Autoridad Portuaria de València (APV). Esta comisión está integrada por representantes de todos los grupos políticos municipales, APV, Cofradía de Pescadores del Grau, FAES, Destino Safor, Escuela Politècnica Superior de Gandia (EPSG), emprendida consignataria del Puerto y personal técnico municipal.
"Mantendremos el compromiso del Ayuntamiento de Gandia que este sea un proyecto consensuado entre todos los agentes sociales y políticos, que promueva la colaboración público-privada y que doy una solución transversal y definitiva que permita resolver la mirada pendiente hacia el mar, siempre teniendo en cuenta el marco legal establecido por la Ley de Puertos", ha afirmado Prieto.
El alcalde resaltó la importancia de la colaboración entre instituciones, la sintonía y la complicidad entre el Ayuntamiento de Gandia y la Autoridad Portuaria de València, "fundamentales para hacer de nuestro puerto, un puerto en lo referente a Europa".
"El futuro de Gandia pasa para mirar nuestro puerto, nuestro mar", ha declarado el alcalde, que ha recordado que en la zona portuaria también está previsto que se ubique otro de los proyectos claves de la legislatura, el Instituto Español de Oceanografía, la única sede de la Comunidad Valenciana. Un proyecto que fue anunciado por la ministra Diana Morant, y que complementará este espacio como generador de oportunidades y ocupación cualificada.
Por su parte, Picornell ha explicado que esta actuación permitirá la dinamización del Grau. "La zona de los tinglados y del puerto se pondrá en valor". Además, según ha añadido, la llegada del Instituto Español de Oceanografía generará cerca de 60 puestos de trabajo directos más otras indirectas, "personas que comerán, vivirán y tendrán satisfechas las necesidades del Grau”. Por otro lado, "cuando abrimos la zona de la calle Juan de la Cierva con la eliminación del muro podremos abrir la avenida del Puerto al mismo muelle mediante un gran paseo abierto que se integre a la trama urbana". "Pondremos todo el que esté de la mano del gobierno municipal para acelerar al máximo estas intervenciones que mejorarán toda esta zona y la calidad de vida de sus habitantes".
El año 1908 se construyeron 12 de los 17 tinglados actuales para cubrir la necesidad de embarcar al puerto la naranja que se exportaba. El año 1931 se añadieron cinco naves más y una torre de 19 metros de altura con relojes a los cuatro lados: la llamada Torre del Reloj. Y desde el 2018, los tinglados están reconocidos como Bienes de Relevancia Local.
Ahora mismo, del 1 al 5, los usos son de la Cofradía de Pescadores, mientras que del 6 al 8 son utilizados por la UPV para llevar a cabo sus investigaciones. Finalmente, el 16 y 17, al tráfico de pasajeros.