VALÈNCIA (EP). El ministro de Justicia, Juan Carlos Campo, ha indicado que el Gobierno no actuará en el caso de Brahim Ghali hasta que la Justicia se pronuncie sobre la situación en España del líder del Frente Polisario, que ha sido imputado por la Audiencia Nacional por diversos delitos, entre ellos lesa humanidad, pero no se ha dictado una orden de detención en su contra.
"Sobre la situación procesal (de Ghali), no tengo ningún pronunciamiento que hacer (...) No creo que fuera respetuoso con la administración de justicia", ha dicho Campo al ser preguntado acerca del líder del Frente Polisario en un encuentro informativo organizado este lunes por Nueva Economía Fórum (NEF).
No obstante, al mismo tiempo ha señalado que "en cuanto la Justicia se pronuncie habrá que tomar las medidas". "Y estaremos a ello, como hace siempre el Gobierno", ha zanjado, sin entrar en detalles.
Ghali fue ingresado el pasado 18 de abril en el Hospital de San Millán-San Pedro, en La Rioja, con un cuadro grave por dolencias derivadas de la COVID-19. Su estancia en España ha llevado a la Audiencia Nacional a citarle como investigado para que el 1 de junio responda a la querella presentada por el activista saharaui Fadel Breica, que le acusa de delitos de detención ilegal, torturas y lesa humanidad presuntamente cometidos en los campamentos de Tinduf.
Además, el juez Santiago Pedraz ha admitido una segunda querella contra Ghali, presentada por la Asociación Saharaui para la Defensa de los Derechos Humanos (ASADEDH), pero ha rechazado adoptar las medidas cautelares solicitadas, "a la vista de su estado de salud" y teniendo en cuenta que "no hay indicios claros de su participación en las conductas recogidas en la querella" de ASADEDH.
Campo ha aprovechado para expresar su preocupación por la crisis con Marruecos, expresando su confianza en que al final habrá "un alumbramiento en el sentido de que se recobrará la diplomacia, ganará espacio, e iremos atenuando estas cuestiones".
Además, ha querido aclarar que "España no ha cambiado en absoluto su posición" en el sentido de que "su relación con Marruecos es de socio prioritario", pero también de que este es un problema de frontera y humanitario que "afecta a toda la comunidad europea".
A este respecto, ha celebrado que "ya está habiendo una mejor coordinación" entre autoridades españolas y marroquíes para el retorno de los miles de migrantes que la semana pasada cruzaron a Ceuta, lo cual está permitiendo alcanzar "ciertas cotas de relax en la tensión de los primeros días".
Preguntado también sobre las llamadas 'devoluciones en caliente', ha defendido que "se han hecho todas conforme a la legislación vigente y a la manifestación del Tribunal Europeo de Derechos Humanos (TEDH)".
En concreto, ha destacado que los menores están teniendo "un tratamiento especial". "Porque hay un interés diferente que proteger, tienen una salida diferente", ha argumentado.
Con todo, ha se ha mostrado "esperanzado" porque "vamos saliendo de estos conflictos diplomáticos sin perder la legalidad vigente y el Derecho, que está ahí, porque son personas los que han atravesado". "Creo que vamos por el buen camino", ha concluido.