CASTELLÓ. Cersaie 2022 ya es historia. La edición postpandemia de la feria cerámica transalpina cerró este viernes sus puertas con un halo de esperanza para el sector azulejero. El propio presidente de Ascer, Vicente Nomdedeu, califica con un "notable alto" la afluencia de clientes y las relaciones entrelazadas en Bologna Fiere durante las dos primeras jornadas, las de mayor vigor. Eso sí, ahora "hay que digerir" esos contactos (y materializarlos en pedidos) para hacer un balance definitivo de una feria que, al menos, ha devuelto al sector la confianza en el mercado.
"La gente está contenta", concluye el representante de la patronal azulejera española. Con él coincide el director comercial de Porcelanosa Grupo, José María Segarra, quien destaca que las "buenas expectativas" con las que la compañía vila-realense acudía a la feria se han visto "superadas". "Hemos comprobado que en el mundo la actividad económica sigue tirando", señala. Y es que en Bolonia han destacado los visitantes asiáticos y sudamericanos, dos zonas que no están afectadas por la crisis energética europea.
También el presidente de la patronal de las esmalteras Anffecc, Fernando Fabra, remarca la buena valoración de Cersaie: "El número de visitantes ha sido considerable y hay demanda de fritas y esmaltes para la producción cerámica a nivel mundial", señala.
Pero hay otro aspecto que ha marcado la feria de los Apeninos. La reivindicación ha sido la otra constante de la semana cerámica italiana. La implementación de ayudas que minimicen "la progresiva pérdida de producción y empleo que estamos sufriendo" en España e Italia se convierte en una obligación, destaca Fabra. También su homólogo de Ascer lo ha solicitado a cuantos representantes institucionales han aparecido por Bolonia. No en vano, con los costes del gas disparados y volátiles "la fabricación de azulejos en Europa, y especialmente en España, está dejando de ser competitiva" señala el presidente de Anffecc.
Llega a partir de ahora el momento de trasladar todas estas reivindicaciones a los gobiernos estatal y continental, a la espera de que el anuncio del consejo de ministros europeo de este viernes sobre los intentos para tratar de acotar los precios del gas pueda tener algún efecto en la industria. De momento, ni desde Ascer ni desde Anffecc se atreven a valorar una medida que no pasa de ser una mera declaración de intenciones. Habrá que ver en qué se concreta a partir del lunes. El futuro inmediato de la industria cerámica, y con ella el de la provincia de Castellón, depende en buena medida de ello.